Padre rico,padre pobre

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE CONTADURÍA Y ADMINISTACIÓN[pic 1][pic 2]

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Finanzas 1

Título del tema:

Padre rico, padre pobre.

Alumno:

• González Rosas Luis Enrique.

Grupo:

                        2429.

                                                                    Nombre del maestro:

Lic. Karina Palma Smith.

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Ciudad  Universitaria, Cd. México,  febrero del 2020.

PADRE RICO, PADRE POBRE

Me gustaría empezar la reflexión sobre este maravilloso libro diciendo que nuestras acciones son el reflejo de lo que queremos llegar a ser a futuro, tanto personal como emocionalmente. Nosotros como adultos somos el reflejo de lo que nos inculcaron nuestros padres a temprana edad, por lo cual nosotros seremos los encargados de transmitirle a nuestros hijos todos los conocimientos y experiencias que poseemos, entre ellos en los apsectos financieros.                   Muchos de los comportamientos de los niños en gran medida dependen de lo absorbido durante la niñez por medio de una figura, que en el mejor de los casos es la del padre.                                 Desde los valores más basicos para interactuar en sociedad, hasta la relacion y administración de sus propia economia. Es por esto que una educacion temprana sobre finanzas podría mejorar la toma de decisiones a futuro en el contexto económico y financiero de la vida cotidiana. La educación financiera debe aprenderse de tal forma que se incorpore todo ese aprendizaje en buenos hábitos en nuestra vida. Si aprendes desde pequeño hábitos financieros adecuados será mucho más fácil que los tengas instaurados de adulto, si lo has puesto en práctica desde niño, seguro que se han convertido en una forma de vida.                                                                    Uno de los aprendizajes más importantes para completer la educación financiera de los niños, es desarrollar su carácter emprendedor. Los niños para conseguir sus objetivos y metas necesitan ser autónomos, confiar en sus propias capacidades, creatividades para solventar dificultades, tener ideas y convertirlas en acciones a la hora de interactuar con estas mismas. Dejando de lado de la educación financiera que pudiste haber tenido en la infancia, el autor resaltaba que uno de los problemas economicos actuales de las personas resalta en la mentalidad que tengas y no tanto en las oportunidades que puedas encontrar. En mucho de los casos la mentalidad influye mucho, desde ciertas costumbres como ahorrar podría desempeñar una buena vida economica. Los pobres no tienen dinero para ahorrar y mucho menos para invertir, aún hay algunos que sí podrían ahorrar dinero, aunque fuera un poco, pero no lo harían, porque no tiene sentido para ellos. Esto es porque los pobres trabajan por dinero, los ricos no. Lamentablemente los pobres tienen una idea errónea del dinero, viven el día a día y si trabajan para tener dinero para el día. Los ricos, en cambio, se anticipan, la mentalidad para ser millonario es la de conseguir que el dinero trabaje para ti. Si consigues cambiar tu concepto del dinero empezarás a borrar este hábito que te ata a la mediocridad.                                                                                                                              Aunque tengas la mentalidad de querer ser un gran empresario hay diversos factores que te pueden tener en el camino, uno de ellos es fracasar. El miedo al fracaso es el principal temor de aquellos que cuentan con la idea de emprender y ser independientes. Esto se debe a que la mayoría de las veces, nadie puede asegurarnos que el negocio caminará bien. Siempre se deberá arriesgar, y es por eso que a continuación te presentamos una serie de consejos para enfrentar el temor al fracaso. Nada puede garantizar su éxito al 100%, y eso es lo que realmente asusta. Me imagino que emprender es una experiencia muy enriquecedora, llena de desafíos, recompensas y también riesgos, que hay que atreverse a sortear, ya que perder dinero es parte del proceso.                                                                                                         El autor muestra algunos ejemplos reales, como McDonald, que aunque su razón social son las hamburguesas, su fortuna está en los bienes raíces, aprovechando el buen nombre de la compañía.                                                                                                                                 Por otra parte el autor denominó a una situación muy común, esa situación la nombraba como carrera de la rata, que no era más que caquella situación en la que tus gastos tienden a crecer al mismo ritmo en que aumentan tus ganancias. Cuanto más ganas, más gastas. Por alguna razón, el dinero siempre es poco para quienes están corriendo esta carrera.Las personas que se encuentran corriendo la carrera de la rata, generalmente tienen ciertos hábitos y costumbres que afectan directamente su economía, impidiéndoles crear activos. Con frecuencia, estas personas ni siquiera pueden distinguirlos como malos hábitos, debido a que toda la vida se comportaron del mismo modo, incluso porque su familia o su entorno, se maneja de igual manera.                                                                                                                        El autor no critica el hecho de la casa propia, ni de la familia, ni de un auto, ni de gastar dinero en un viaje, lo que quiere dejar en claro es el hecho de que se podría llegar a lo mismo sin la necesidad de adquirir “deudas malas” que terminan siendo pasivos (algo que te quita dinero). Por el contrario plantea el hecho de que tienes que trabajar en incrementar tu inteligencia financiera.                                                                                                           El autor hacia cierto hincapié en las actitudes que hace que las personas pobres sigan haciéndose más pobres, mientras que las ricas optaban por nuevos códigos que los hacían más ricos. Acciones tan simples como que los ricos usan el dinero que ahorran para inversión para crear nuevas fuentes de ingresos. Dedican ese dinero para comprar acciones, adquirir una propiedad inmobiliaria, invertir en un negocio. Hay muchas formas de activos. Pero el rico no se abandona a la suerte de depender toda su vida a una nómina o negocio como única fuente de ingresos. Dedica un porcentaje de su dinero siempre a la inversión y la creación de activos que le proporcionen una fuente adicional de ingresos. Sobre todo buscan nuevos negocios, da igual el tamaño. Se aventuran a emprender nuevos proyectos.        Otro de los habitos que adquirían era el comprar o crear activos; de todo tipo. Ya pueden ser activos financieros como acciones, activos inmobiliarios como garajes, casas, terreno. Todo aquello que ponga dinero en su bolsillo mediante una renta periódica. Antes de comprarse el Audi, o endeudarse hasta las cejas, adquieren activos que les proporcionen una serie de ingresos. Son esos activos los que pagan sus caprichos, no su nómina ni su fuente principal de ingresos. Pero claro, tú quieres disfrutar del Audi hoy, por eso la clase pobre pide un crédito.                                                                                                                                        Nosotros como estudiantes, futuros trabajadores, empleados, profesores, y padres de familia deberíamos comprometernos a educar más la parte financiera; a no limitar. El esquema de educación en México está interesado en hacernos habilidosos para ser profesionales, pero no para ser ricos, no para hacernos pensar en ser empresarios; sino nos dicen “el día de mañana que se encuentren trabajando.                                                                                 Compartir conocimientos y experiencias logra compromiso y lealtad de los empleados. Muestra generosidad, y esto es valorado por los demás, quienes en agradecimiento serán valorados por la compañía, empresa o negocio y ayudarán a crecer esa fortuna.                 Ser rico es una actitud. Es un estilo de vida.

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