Poutlanzas: Estado, poder y socialismo.

POUTLANZAS

“Estado, Poder y Socialismo”

1. Sobre la teoría del Estado

El Estado y el poder estarían constituidos por un núcleo impenetrable -en primera instancia- y un resto, al que las clases dominantes podrían afectar, o bien introducirse. Todo Estado según marxismo, no sería más que una dictadura de clases, es decir, puramente instrumentalista, que reduce el aparato del Estado al poder del Estado. No debería hablarse de una naturaleza de clase, si no de una utilización de clase.

El Estado presenta una armazón material propia, que no puede ser reducida a la dominación política. Esta dominación se encuentra inscripta en la materialidad institucional, pero el Estado no puede ser concebido como producido de arriba-abajo por las clases dominantes, ya que no todas las acciones del mismo  se reducen a la dominación política. No se trata de una estructura económica en las que se hallarían ausentes las clases, los poderes y las luchas.

Es necesario desmarcarse de una concepción economicista formalista que la considera como compuesta de elementos invariantes en los diversos modos de producción, de naturaleza autoreproducible y autoregulada. En sí, esta concepción oculta el papel de las luchas alojadas en las relaciones de producción y explotación. Otro equivoco, seria entender al conjunto social como instancias autónomas por naturaleza. Ambas concepciones, conciben las relaciones entre el Estado y lo económico, como  relaciones de exterioridad cualesquiera sean las figuras empleadas para designarlas.

El espacio y el lugar de la economía, de las relaciones de producción, de explotación y extracción del plus-valor, no ha constituido nunca un nivel hermético y en posesión de sus propias leyes de funcionamiento interno.

Los conceptos economía y Estado, no pueden tener la misma extensión, ni el mismo campo, ni el mismo sentido en los diversos modos de producción.

En el capitalismo moderno, los productores modernos se encuentran desposeídos del objeto y de los medios de su trabajo, es decir no solo hay una separación en la relación de propiedad sino también en la relación de posesión. El Estado capitalista delimita nuevos espacios y campos respectivos del Estado y de la economía, la cual es una de las características propias. No puede existir una teoría general de lo político-estatal, pero resulta genuina una teoría del Estado capitalista. El Estado capitalista no permite plantear proposiciones generales sobre el Estado. No podrían constituir más que guías para la acción. No hay, ni puede haber un modelo posible de un estado de transición al socialismo. Hay siempre una distancia estructural entre la teoría y la práctica, entre la teoría y la realidad. No tener en cuenta esta distancia, es hacer decir al marxismo cualquier cosa. El Estado no puede ser captado en toda su complejidad por generalizaciones totalizantes, y su teoría no puede ser aislada de una historia de su constitución y de su reproducción. Debe ser elaborada relacionando al Estado con la historia de las luchas políticas bajo el capitalismo. Cada modo de producción materializa y condensa las relaciones político-ideológicas en las relaciones de producción y en su reproducción. Situar el Estado en su vinculación con las relaciones de producción es, configurar los primeros contornos de su presencia en la lucha de clases.

1. Los aparatos ideológicos: ¿El Estado = Represión + Ideología?

El Estado no se limita al ejercicio de la represión física organizada. Tiene un papel propio en la organización de las relaciones ideológicas y de la ideología dominante. Tampoco se limita al binomio R + I. La ideología no es mero sistema de ideas o de representaciones, implica también a una serie de practicas materiales. Las relaciones ideológicas se comprenden como esenciales en la constitución de las relaciones de propiedad económica y de posesión, en la división social del trabajo dentro mismo de las relaciones de producción. Recurrir a la ideología es también legitimar la violencia y organizar el consenso de ciertas clases y fracciones respecto al poder político. La ideología no es algo neutro en la sociedad, solo hay ideología de clase.

La ideología de dominante se encarna en los aparatos del Estado. Las distinciones entre aparatos ideológicos y aparatos represivos, no debería subestimar su papel represivo. Represión es violencia organizada sobre los cuerpos. Es la amenaza mortífera. El cuerpo es entendido como una institución política. El Estado es co-extensible en su materialidad de consumir a los sujetos; Así también, el Estado actúa de manera positiva crea, transforma y produce realidades. Este procura siempre la hegemonía de clase, actuando en un equilibrio inestable de compromiso entre las clases en pugna. Por lo tanto, asume una serie de medidas materiales positivas para las clases populares. La acción estatal rebasa la ideología y la represión. Si se entiende la acción del Estado por el binomio I-R, se conduce a escindir el ejercicio del poder en dos aparatos; ya que dividirlos de manera nominalista.

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