¿Quién está sosteniendo tu escalera?

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Capítulo 4

¿Cómo reclutamos voluntarios?

En el capítulo anterior conocimos las cinco cualidades que debe tener un sostenedor de escalera, ahora entonces ya sabemos que las cualidades que no debe tener un sostenedor de escalera y también las que si debe tener esa persona que debe de estar en nuestro equipo.

Una vez que ya conocemos lo que debe y no tener nuestro sostenedor de escalera, el siguiente paso es reclutarlo, el reclutamiento de una persona para ocupar un puesto puede ser de distintas formas; sin embargo, es muy común que se utilicen ciertas técnicas dependiendo del área o giro de la organización que este contratando. Por lo general en el Ministerio la forma más común de ocupar un lugar es mediante voluntarios, no es que este mal, todos somos buenos para desempeñar alguna actividad y por ende tenemos diferentes cualidades que nos distinguen uno de otro. El hecho de que el personal que estemos reclutando no tenga sueldo, no significa que lo vamos a tomar y le vamos a entregar una responsabilidad que no se ajuste a sus capacidades, pues, aunque tenga todas las ganas, su perfil no empata con los requerimientos del puesto.

Un claro ejemplo de todo esto es Jesus, en diversas citas bíblicas, podemos darnos cuenta de que Jesus eligió a sus seguidores, les enseño y los desarrollo conforme a las habilidades que tenían. Justamente de eso se trata, como líderes, debemos instruir y desarrollar a las personas que integran nuestro grupo, todos tienen habilidades excepcionales, en el proceso de desarrollo podremos ubicar a estas personas en el puesto correcto, todo son necesarios. Si queremos que nuestra escalera llegue más alto debemos enseñarles el camino correcto.

Ahora bien, ya que tenemos a las personas, que las desarrollamos y que les indicamos que deben hacer, debemos saber que lo que estamos haciendo no solo es bueno si, no que es algo mas grande que nos hará dichosos.

El autor menciona tres puntos para ayudarnos a nosotros mismos y a otros a encontrar la dicha, por lo que antes de subir la escalera necesitamos:

1. Decidir a donde queremos ir. Debemos estar seguros de la razón por la que subiremos la escalera y saber que tenemos todo listo antes de subir.
2. Ser claros respecto a nuestra visión. Saber la razón por la que estamos y porque estamos trabajando duro. Un líder siempre se pregunta ¿Qué? Y ¿Para qué? Un seguidor preguntara ¿Cómo? Y ¿Cuándo?
3. Preguntarnos ¿Qué estamos haciendo para prepararnos como comunicadores? Que herramientas tenemos y necesitamos para llegar a todas las personas.

Algo muy importante que debemos recordar es que tanto lideres como seguidores pertenecemos a varias generaciones y que estas clasifican a las personas de acuerdo a rasgos culturales, sociales, ideológicos, entre otros; como lideres debemos de entenderlos y tener la capacidad para dirigirlos, hablarles y llevarlos por el camino de dios de acuerdo a su forma.

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