Reflexion Frente A La Clase

No hay nada imposible, el cielo es el límite.

Muchas veces en la vida las dificultades nos llevan a dejar atrás todo aquello que deseamos, empañando nuestra esencia de derrotas y desaciertos. Las personas le damos mucha importancia a la opinión externa que en vez de alentarnos, nos derrumba y nos encierra en la idea de que no podemos, de que no servimos, de que jamás lograremos algo, le tenemos miedo a vivir.

Pensé en todo eso después de ver la película Frente a la clase, que nos enseñan cómo darle un sentido increíble de profundidad a nuestras vidas, ella nos narra la historia de vida de su protagonista, Brad Cohen, quien padece de una extraña enfermedad incurable llamada Síndrome de Tourette, caracterizada por la realización de ruidos y movimientos extraños, ambos involuntarios, los cuales le ocasionaron durante su infancia diversos conflictos, constantemente se enfrentó a una sociedad que no tolera la diferencia, a la inaceptación de su papá, compañeros y docentes es manifiesta con insultos, apodos, agresiones, regaños y discriminación, es sometido a burlas constantes y a las ridiculizaciones, pero siempre contó con su mamá quien lo apoya a seguir adelante a pesar de lo que el resto de mundo piense, animándolo a nunca dejarse vencer por la enfermedad. Su sueño siempre fue, además de ser la mascota de un equipo de béisbol, enseñar y convertirse en un maestro, pero el Tourette pues se vuelve un gran impedimento para alcanzar este sueño y la película describe esencialmente cómo Brad siempre mantiene una actitud optimista y nunca pierde la esperanza de lograr sus objetivos. A pesar de haber sido un estudiante universitario brillante le resulta muy difícil encontrar empleo como maestro debido a su enfermedad, pero jamás se dio por vencido, siguió adelante en contra de todo pronóstico, de quienes no creían en él, excepto su madre, su hermano y sus pocos amigos. Después de visitar muchísimas escuelas es contratado en una y hace un trabajo excelente que lo hace merecedor del reconocimiento como mejor maestro.

Brad es una persona luchadora, él menciona que su mejor maestro fue su enfermedad, que lo enseñó a perseverar y a no darse por vencido. Su vida es un ejemplo de perseverancia, te inspira a nunca dejarte ganar por las dificultades a pesar de cualquier adversidad, a disfrutar la vida, ir por tus sueños y a no detenerte por nada. Es inevitable pensar que pocas limitaciones tenemos nosotros, y aún así nos rendimos fácilmente. Luchemos por cumplir nuestros sueños y ten siempre presente que: el cielo es el límite.

Mirley Cárcamo Serpa

2014116026

Vida Universitaria

Grupo 1

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