Resumen 7 Habitos De La Gente Altamente Efectiva
Enviado por kat88y • 17 de Agosto de 2011 • 5.760 Palabras (24 Páginas) • 2.450 Visitas
RESUMEN DE LOS SIETE HABITOS DE LA GENTE ALTAMENTE EFECTIVA
Prólogo
Al reflexionar sobre la tarea de escribir este prólogo constaté el reto que representa agregar valor al ya presentado por el doctor Stephen Covey en su obra.
Fue así que recordé la experiencia que tuvimos durante un seminario que dictó Walter Santalis en Colombia sobre el tema de los Siete Hábitos de la Gente Altamente Efectiva, el cual tenía una duración de tres días.
Durante el seminario surgieron inquietudes y preguntas sobre los principios que dan sustento a los Siete Hábitos. La noche anterior al último día nos planteamos algunos de estos
Interrogantes y decidimos hacer una síntesis que nos pudiera mostrar una descripción de la esencia de cada hábito y el resultado que podríamos esperar al practicarlo.
El hábito de la proactividad nos da la libertad para poder es coger nuestra respuesta a los estímulos del medio ambiente. Nos faculta para responder de acuerdo con nuestros principios y valores.
Comenzar con un fin en mente hace posible que nuestra vida tenga razón de ser, pues la creación de una visión de lo que queremos lograr permite que nuestras acciones estén dirigidas a lo que verdaderamente es significativo en nuestras vidas.
Poner primero lo primero nos permite liberarnos de la tiranía de lo urgente para dedicar tiempo a las actividades que verdaderamente dan sentido a nuestras vidas.
Pensar en ganar/ganar nos permite desarrollar una mentalidad de abundancia material y espiritual, pues nos cuestiona la premisa de que la vida es un «juego de suma cero» donde para que yo gane alguien tiene que perder.
Buscar comprender primero y después ser comprendido es la esencia del respeto a los demás
Sinergizar es el resultado de cultivar la habilidad y la actitud de valorar la diversidad. La síntesis de ideas divergentes produce ideas mejores y superiores a las ideas individuales.
Afilar la sierra es usar la capacidad que tenemos para renovar nos física, mental y espiritualmente.
Las personas con hábitos de efectividad son las piedras angulares para formar organizaciones altamente efectivas.
PRIMER HÁBITO
SEA PROACTIVO
Mientras lee este libro, trate de tomar distancia respecto de sí mismo, piense en el estado de ánimo en el que se encuentra. Piense ahora por un minuto sobre cómo está trabajando su mente ¿Es rápida y despierta?
Su capacidad para hacer lo que acaba de hacer es específicamente humana y la denominamos “autoconciencia”; es la aptitud para pensar, es la razón por la que el hombre posea el dominio de todas las cosas del mundo y de que pueda realizar progresos significativos de generación en generación. Por eso podemos evaluar y aprender de las experiencias de los otros, tanto como de las nuestras.
La autoconciencia nos permite distanciarnos y examinar incluso el modo en que podemos ver el paradigma de nosotros mismos, que es el más fundamental para la efectividad. Afecta no sólo a nuestras actitudes y conductas, sino también al modo en que vemos a las otras personas. Se convierte en nuestro mapa de la naturaleza básica de la humanidad.
De hecho, mientras no tengamos en cuenta cómo nos vemos a nosotros mismos no seremos capaces de comprender cómo ven los otros y qué sienten acerca de sí mismos y de su mundo.
Esto limita significativamente nuestro potencial personal y también nuestra capacidad para relacionarnos con los demás. Pero a causa de la singular capacidad humana de la autoconciencia, podemos examinar nuestros paradigmas para determinar si son principios basados en la realidad, o están en función de condicionamientos y condiciones.
Si la única visión que tenemos de nosotros mismos proviene del espejo social la concepción que tengamos de nosotros será como la imagen reflejada en los espejos deformantes de los parques de atracciones.
Estas imágenes están como desmembradas y carecen de proporción. El reflejo de los actuales paradigmas sociales nos dice que estamos en gran medida determinados por el condicionamiento y por ciertas condiciones. Aunque hayamos reconocido el tremendo poder del condicionamiento en nuestras vidas, decir que estamos determinados por él, que no tenemos ningún control sobre esa influencia, genera un mapa totalmente distinto.
El determinismo genético dice básicamente que la culpa es de los abuelos. Ésa es la razón de que usted tenga mal genio. Sus abuelos eran irascibles y eso está en su ADN. El ADN pasa de generación en generación y usted lo ha heredado.
El determinismo psíquico dice básicamente que la culpa es de los padres. Su educación, sus experiencias infantiles establecieron lo esencial de sus tendencias personales y la estructura de su carácter así es como lo educaron sus padres.
El determinismo ambiental dice que la culpa es del patrón o el jefe (o de su esposa, su hijo adolescente, su situación económica o la política nacional). Alguien o algo de su ambiente es responsable de su situación.
Todos estos mapas se basan en la teoría de estímulo/respuesta que solemos asociar con los experimentos de Pavlov. La idea básica es que estamos condicionados para responder de un modo particular a un estímulo concreto.
Los límites y parámetros de nuestra vida estarían fijados y, en lo esencial, no sería mucho lo |que podríamos hacer al respecto.
Entre el estímulo y la respuesta, el ser humano tiene la libertad interior de elegir.
La libertad de elegir incluye los privilegios que nos singularizan como seres humanos. Además de la autoconciencia, tenemos imaginación, tenemos conciencia moral y tenemos voluntad independiente.
Si bien la palabra proactividad es ahora muy común en los textos de dirección de empresas, se trata de un término que no se encuentra en la mayoría de los diccionarios. No significa sólo tomar la iniciativa. Significa que, como seres humanos, somos responsables de nuestras propias vidas. Tenemos la iniciativa y la responsabilidad de hacer que las cosas sucedan.
Las personas proactivas centran sus esfuerzos en el círculo de influencias. Se dedican a las cosas con respecto a las cuales pueden hacer algo.
El enfoque proactivo consiste en cambiar de adentro hacia afuera: ser distinto, y de esta manera provocar un cambio positivo.
Si bien somos libres para elegir nuestras acciones, no lo somos para elegir las consecuencias de esas acciones
SEGUNDO HÁBITO
EMPIECE CON UN FIN EN MENTE
Empezar con un fin en mente representa comprender claramente el destino. Significa saber adónde se está yendo, de modo que se pueda comprender mejor dónde se está, y dar siempre los pasos adecuados en la dirección
...