Resumen Casa De Muñecas
Enviado por mendigo • 30 de Mayo de 2012 • 361 Palabras (2 Páginas) • 1.068 Visitas
REALISMO.-
En lenguaje teatral la palabra “Realismo” es un término muy preciso. Una obra de teatro puede imitar vida, pero no es vida; por mucho que se esfuerce en imitarla sigue siendo arte, algo artificial. Así lo define Aristóteles en su Arte Poética. Pero las “obras sociales” de la segunda etapa del autor noruego Henrik Ibsen proporcionan el patrón del Teatro Realista y es difícil que una obra imitadora de la naturaleza que no siga el modelo del autor noruego. Los personajes sacados de una observación detallada de la vida misma, colocados en situaciones posibles y que se mantienen unidos por la singularidad de la trama. Los diálogos, gestos, acciones y movimientos reconocibles como reales. Las cosas que les suceden a los personajes y el orden en que ocurren corresponden a un plan meticulosamente elaborado por el autor con el objetivo de crear la sensación de realidad.
A partir del modelo de Ibsen se puede ir avanzando o retrocediendo hacia el “Naturalismo” o hacia el “Convencionalismo” de la “obra bien hecha”. Dentro del realismo, la corriente estilística del naturalismo pretende introducir al espectador como observador subrepticio de trozos de vida de unos seres unidos por el ambiente en que viven. Con las problemáticas sociales o personales del medio en el que viven, aunque sin necesidad de interconexión de las historias entre si. Cada uno vive su monodrama y el mosaico que componen en su conjunto, el tapiz en el que se muestra la vida en el medio, es el protagonista de la obra. El modelo dramatúrgico de Máximo Gorki en su obra “Los bajos fondos” es considerado como guía para este estilo dramatúrgico, en el que no existen personajes protagonistas y se prescinde de procedimientos teatrales para conseguir efectos emocionales. El naturalismo se concentra en la verdad y la realidad de cada uno de los individuos que intervienen en la trama, con el colorido e intensidad particular de cada uno de ellos. No le preocupa la forma en que cada personaje se relaciona con los demás y los objetivos escénicos están en el extremo opuesto a los cuidados en la utilización de efectos y procedimientos teatrales del convencionalismo de “la obra bien hecha”.
...