Resumen "El pasado ha muerto" de Isaac Asimov

Resumen: “El pasado ha muerto” de Isaac Asimov

El pasado ha muerto es un cuento que narra la historia de un hombre, Arnold Potterley, quien estudió filosofía e historia antigua, considerando que la historia se cuenta en un futuro distante al nuestro, la rama de la historia no era un campo muy productivo ya que la mayoría de los registros se habían perdido ya a través del tiempo. A la historia se añade un tono dramático ya que se añade a la historia del protagonista los recuerdos de su hija, quien murió en un incendio dentro de su hogar. Este punto juega un papel muy importante pues la esposa de Potterley siempre se lamentaba por la pérdida de su hija y lo demostraba algunas veces en su conducta, con cierto desinterés hacia su propio esposo. A la historia se añade un joven al cual Potterley acude en busca de ayuda y que al final solo logran generar problemas a gran escala.

Todo comienza con Potterley en una oficina de cierto hombre, encargado de asignar el uso del cronoscopio, una máquina que permitía ver el pasado, esto era de gran interés para Potterley ya que, para su área de estudio, el cronoscopio era la única forma de comprobar sus teorías. Después de una difícil charla con el hombre, Potterley recibió la posibilidad de utilizar el cronoscopio, pero para ello debía esperar dos años ya que su uso ya estaba reservado para otras investigaciones.

Potterley no podía esperar tanto tiempo, él tenía una teoría acerca de una civilización antigua que pudo ser la más grande existente y que sin embargo los textos que hablaban sobre ellos no le daban el crédito que Potterley justificaba con sus investigaciones actuales. Él no se pudo quedar de brazos cruzados y ya que los científicos no le daban la oportunidad de usar el cronoscopio, él se construiría el suyo.

Antes de continuar se debe de definir el contexto en el que se desarrolla la historia. El lugar es Estados Unidos, un futuro cercano en el que el desarrollo científico se da cada vez con mayor velocidad que llega al punto en el que las instituciones, en especial las gubernamentales, deben controlar las investigaciones que realizan los científicos, a mi entender esto lo hacen para evitar que se generen conocimientos que lleguen a ser más perjudiciales que benéficos. Esto llega al punto de que cualquier científico registrado que muestre indicios de realizar investigaciones fuera de las previamente solicitadas y asignadas se le sería revocada toda autoridad para desarrollar investigaciones en el futuro.

Es aquí donde en entra el joven, Foster, estudiante de física, era perfecto para Potterley ya que necesitaba a alguien con sus conocimientos, le comentó su situación y el muchacho se sorprendió de que el hombre quisiera hacer algo de esa escala en contra de los lineamientos de la sociedad científica. En fin, el joven se interesa por la actitud de Potterley ya que él solía ser un hombre muy reservado además de su interés en el propósito que tendría el cronoscopio.

El joven accede a ayudar a Potterley y trabajan en el sótano del historiador ocultando sus acciones inclusive de su propia esposa. Un día, después de escuchar mucho ruido la mujer de Potterley baja a ver que sucedía y entonces lo ve, en principio no sabía lo que era, pero los hombres ya llevaban varios meses trabajando en ello, no tuvieron más opción que decírselo. La mujer al escuchar lo que le dice su esposo no lo cree, pero entonces cruza por su mente una cosa que jamás olvidaría, su hija. La mujer enloquece ya que quería volver a ver a su hija, pero su esposo la detiene ya que esa era una de las cosas que el temía, que, si dejaba que ella hiciera eso, solo le generaría más dolor. De alguna manera, en este punto, el texto da a entender que tal vez el incendio en el que murió su hija fue generado por el mismo Potterley y que la investigación que realizaba, tratando de reivindicar a aquella civilización antigua, solo era una forma de justificarse a sí mismo, que si tal vez esa civilización no era tan mala como los textos lo decían tal vez lo que el provocó no sería tan malo como él pensaba, extraña forma de demostrarlo.

...