Resumen Libro cuentos de la selva

Cuentos de la selva.

La tortuga gigante: había una vez un hombre de Buenos Aires, que tenía 3 hermanos chicos a quienes daba de comer. Un día él se enfermó y los doctores le dijeron que se tenía que ir al campo porque solo así él podía curarse. Él no quería ir porque tiene que alimentar sus hermanos pequeños. El tiene un amigo en el zoológico, y un día el le dijo que es un hombre sano y trabajador, y que quiere que se vaya al monte a conseguir unas pieles para su amigo, y él le dará dinero para que sus hermanos pequeños coman bien.

El hombre acepto y se fue al monte, muy lejos de la civilización, donde el vivía solo y mataba para comer, muchos animales, y también cazaba para conseguir las pieles de los animales. El hombre se fue recuperando poco a poco, y un dia encontró a una tortuga gigante, que estaba siendo atacada por un tigre, y el hombre como era bueno con la escopeta, ataco al tigre y lo mato, después se llevó a la tortuga y cuido de ella y la curo, después de que la tortuga sano, el hombre se enfermo y tenia mucha fiebre, y pidió auxilio, y la tortuga cuido de el, hasta que un dia el hombre estaba muy enfermo y la tortuga lo tuvo que llevar a la ciudad otra vez, donde casi se rendían, pero lograron llegar y el hombre sano y la tortuga y el se hicieron amigos por siempre.

Las medias de los flamencos: las víboras dieron un gran baile e invitaron a varios animales a participar en él, todos los animales se arreglaban muy bien para bailar en especial las víboras. Entonces, estaban los flamencos, que eran demasiado tontos para arreglarse y bailar, y les daba envidia los otros animales, más las víboras. Un dia se les ocurrió que para que las víboras los amaran a ellos debían usar unas medias coloradas, blancas y negras. Estuvieron preguntando por todos lados y nadie tenia esas medias, entonces fueron con una lechuza y ella les trajo las medias, que en realidad eran pieles de serpiente de coral, los flamencos se pusieron las medias y fueron al baile. Todos amaban sus medias, también las víboras. Ellos no paraban de bailar, pero cuando ya no pudieron más, se detuvieron, y las víboras vieron que estaban usando pieles de sus semejantes, entonces mordieron a los flamencos en sus patas flacas, y sus patas se pusieron rojas, y desde entonces los conocen como los flamencos con las patas coloradas.

El loro pelado: había una vez un grupo de loros en el monte. Un dia un cazador  tiro a uno de ellos con un disparo, y este agarro al loro y se lo llevo a los hijos del patrón. Los hijos cuidaron de el y lo sanaron. El loro era muy curioso y siempre repetía lo que escuchaba. Un día se fue al monte y un tigre lo ataco salvajemente dejándolo pelón de todo el lomo, le arrancó todas las plumas. El loro no quiso regresar su casa porque le avergonzaba que lo vieran así todo pelón y feo. Entonces el loro estuvo viviendo en una cueva por mucho tiempo hasta que salieron de nuevo sus plumas. Después regreso a casa y los niños estaban muy contentos porque había regresado. El loro converso con el cazador y le explico que había pasado, entonces el le dijo que había que vengarse del tigre. Entonces fueron a buscar al tigre al monte, y el loro empezó a atraerlo, entonces el cazador lo ataco, y lo mato de un disparo, el loro estaba demasiado contento porque el tigre había muerto, y el hombre también porque además pudo conseguir una piel de tigre para la cocina, después de regresar a casa todos supieron porque el loro estaba oculto por mucho tiempo.

La guerra de los yacarés: se trata de unos yacarés que vivían en un lago y un día una nube apareció y el yacaré más viejo dijo que era una nube mala, después de un tiempo los bichos y peces que comían se iban del lago entonces los yacarés se preocuparon. Construyeron un dique para que los barcos no espanten a los peces ni a los bichos, una noche pasó un barco de guerra que empezó a disparar y rompió el dique y lo volvieron a construir y el barco lo seguía destruyendo hasta que un día lo reconstruyeron pero esta vez más fuerte y el barco no lo pudo destruir, y los yacarés consiguieron un torpedo, de un surubí, y lo lanzaron contra el buque de guerra, matando a todos.

La gama ciega: Una gama tuvo dos hijos, uno de ellos murió porque se lo comió un gato montés, la otra gamita, que era hembra, era muy querida por todos. Pero también era muy curiosa. Su mama siempre le decía que se cuidara bien, que mirara a todos lados para ver si no había depredadores, también al beber agua, ver si no hay yacarés antes de acercarse.

Un día la gamita andaba por la selva y metio la cabeza en una colmena para comer la miel, y le picaron demasiadas abejas, dejándola con la cara hinchada y casi ciega, no podía hacer nada. Su mama la encontró, y estaba muy desesperada por que no sabía que hacer para salvar a su gamita. Hasta que un dia le dijeron a la mama de la gamita, que un cazador en el pueblo, podría tener remedios para curar a su gamita. La mama fue al pueblo y cuando encontró al cazador, le pidió ayuda, el le dijo que si que podía ayudarla, y le dio unos remedios para curar a su gamita. La gamita después de un tiempo sano, y la mama estaba muy contenta, ahora va frecuentemente a visitar al cazador, porque se hicieron muy amigos.

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