Robinson Crusoe En El Presente

La obra literaria aventuras de Robinson Crusoe, publicada en 1719 por el famoso novelista ingles, Daniel Defoe nos presenta un personaje desafortunado que por azares del destino termina naufragando en una isla aparentemente desértica; por tal razón el personaje principal debe aprender a sobrevivir en contra de las adversidades de la naturaleza. Lo cual mantiene similitudes considerables con el famoso programa “A prueba de todo” en el cual se trata en su mayoría de una persona que se enfrenta con pocos recursos a las condiciones desfavorables del medio ambiente, también tiene similitudes muy marcadas con la taquillera película “Naufrago”, en la cual Tom Hanks interpreta a un naufrago en una isla desierta, a causa de un accidente aéreo. Además esta increíble novela tiene considerables similitudes con una interesante película llamada “La isla de los condenados” en esta, unos reos son condenadas a naufragar en una isla en la que deben llevar a cabo una pelea de supervivencia. Por lo que es evidente la influencia de Daniel Defoe en las tramas acerca de tragedias en las que el protagonista debe sobrevivir con sus capacidades.

El naufrago Chuck Noland (Tom Hanks) esta relacionado con Robinson Crusoe, debido a que tienen las siguientes similitudes, los dos tienen un gran impacto en la trama de la historia y conforme pasa el tiempo en ambas historias estos adquieren técnicas de supervivencia, incluso ambos tienen un amigo que los ayuda a pasar un tiempo mas agradable en la isla en el caso del naufrago, su amigo es llamado Wilson, del cual se hace mención en el siguiente dialogo: “-Naufrago: Wilson, por casualidad ¿no tendrás un fósforo?” (Guevara, 2012), por otro lado Robinson conoce a un nativo caribeño al cual bautiza como Viernes, es evidente la importancia de los amigos en la trama de dichas historias ya que llegan en el momento en el que los protagonistas están mas desesperados, que sin la ayuda emocional de un amigo hubiesen entrado en una grave depresión.

En la película “La isla de los condenados”, un reo condenado a muerte llamado Jack Conrad es arrojado a una isla junto con otros diez reos para que se asesinen entre ellos y el que finalice vivo obtendrá su libertad, similar a la manera en que Robinson Crusoe tiene que encontrar la manera de sobrevivir contra un grupo de caníbales. Mientras estaba recluido en la isla, Crusoe piensa “Además, debo confesar con dolor, la turbación de mi espíritu había afectado notablemente mis pensamientos religiosos y el terror de caer en manos de salvajes y caníbales me oprimía de tal modo, que rara vez me encontraba en disposición de dirigirme a mi Creador. No tenía la calma ni la resignación que solía tener sino que rezaba bajo los efectos de un gran abatimiento y de una dolorosa opresión, temiendo y esperando, cada noche, ser asesinado y devorado antes del amanecer” (Cabrera, 2012), de la misma manera en que Jack teme por su vida

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