TODOS SOMOS JUAREZ

El proyecto “Todos somos Juárez”, desarrollado en México, consistía en cumplir 160 promesas en 100 días, cuya finalidad era erradicar la crisis general en la que se encontraba la ciudad en los sectores económico, social y salud. El proyecto se enfocaba tanto en el desarrollo personal del ciudadano como el lugar en donde se desarrolla. En primer lugar, para lograr esta meta, a cada ciudadano juarense se le otorgaron oportunidades para que pueda salir adelante. Por un lado, se brindaron oportunidades de estudios a los jóvenes con el fin de que su inserción laboral se obtenga con mayor facilidad. Asimismo, se otorgó la oportunidad de participar en actividades sociales y deportivas, tales como el fútbol, danza, básquet, entre otros. Estas actividades fueron aplicadas con el fin de mantener alejados a los jóvenes de los facilitadores del delito, como lo son el alcohol, drogas, armas de fuego, etc. Por otro lado, mediante programas de financiamiento y capacitación se apoyó a las empresas locales y al desarrollo del trabajador. Por ende, se logró la creación de más de 25 mil nuevos empleos formales. Por ejemplo, el surgimiento de 21 estancias infantiles generó oportunidades para apoyar a madres trabajadoras. En segundo lugar, el proyecto “Todos somos Juárez” iba orientado al ambiente en donde el individuo se desenvuelve. En principio, se comenzó a recuperar los espacios públicos, ya que se encontraban abandonados y eran puntos de confrontación delincuencial. De esta manera, se recuperaron las  zonas de Juárez en donde se propiciaban el delito. Por ejemplo, se recuperó el Parque Pasajes del Sur, el cual, después de ser restaurado, sirvió para la construcción del tejido social. Además, también se benefició el sector salud. Esto se debe a que los centros de rehabilitación fueron abastecidos con los insumos necesarios para el tratamiento tanto psicológico como patológico de las personas que ya padecen un estado que encamina a pertenecer al mundo delictivo.

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