Pequeñas historias Crónicas de Tom.
Enviado por Jorge Ponce • 13 de Septiembre de 2016 • Apuntes • 1.827 Palabras (8 Páginas) • 242 Visitas
Crónicas de Tom.
Vida – Y ahí estaba el, sin recuerdo alguno cómo si de un golpe hubiera esfumado todo, confundido, anonadado despertó en el pisó en un pequeño cuarto de algún hotel, de alguna ciudad diciendo todo el tiempo ¿Qué me pasa? Se acercó lentamente a un espejo colgado a lado de una pequeña cama, observando su rostro llenó de ojeras, moviendo su rostro como sí él se enojara consigo mismo; fue cuando vio en el reflejo en la mesita una pequeña laptop encendida, ahí estaba solo un archivo en el escritorio y una pestaña abierta
The Forest – Después de una turbia noche en algún lado del mundo, Thomas salió al balcón de aquél hotel, se quedó pensando más en por que escribió esas historias, ¿quizá tenga algún trastorno? O quizá solo sea el efecto de un ocio irrefutable de cada noche al no poder dormir, que rayos no es la escuela o al menos eso piensa él; mientras el sol empezaba a salir tenía una buena vista desde el balcón, del otro lado de la carretera había un pequeño bosque y decidió tomar su mochila e ir hacia haya, quería ver el amanecer dentro de un ambiente pacífico digo el momento lo amerita "depresión por no encontrar trabajo, no saber porque rayos escribía historias sin sentido y peor pensar que eran reales"; pasaron 20 min hasta que Tom encontró un lugar perfecto fue cuando hizo esa expresión casi idéntica como cuando la chica que te gusta te envía un mensaje, pero era más que eso se sentó en el pasto recargando en un tronco en el piso
La chica en la banca – Al fin en casa, después de varios días de vacaciones en el extranjero Thomas regresó a la pequeña ciudad aunque Vicky lo recibió con muchos quehaceres, bien lo dijo "si no me traes algún souvenir tendrás mucho trabajo que hacer en casa" así que tomo rumbo al centro comercial a comprar algo que la contestará; pasaron 30 minutos después de tomar el transporte urbano y llegar al centro y fue cuando paso por una pequeña plaza a lado del centro comercial en ese momento vio a esa chica de piel pálida, cabello oscuro como la noche y labios carnosos ... "Cualquiera se enamoraría de ella" se veía contenta tenía una sonrisa de lado a lado pero algo impaciente quizá esperando algo o á alguien, Thomas dijo: "Hoy no amigo" y siguió su camino. Paso el tiempo quizá una hora y desde lo alto de un balcón se veía aun la chica esperando pero esta vez se veía enojada, con furia hasta parecía que odiaba al mundo y quería golpearlo con sus puños. Al fin encontró algo para Vicky una playera de su película favorita "esperemos le quede "dijo Thomas "si no la venderé"; saliendo del centro comercial Tom cambio su rostro a uno más curioso puesto que vio a la misma chica sentada en la misma banca ¿Cómo puede ser posible? dijo en su mente, ella estaba destrozada, triste quizá le pasó algo Tom poco a poco se iba acercando a ella pero se detuvo a unos 5 metros de donde estaba sentada y mejor dio media vuelta y se fue "pensó que quizá no le inconvenia involucrarse o preguntar que tenía". Iba ya casi llegando al crucero de la calle principal que recapacito y dijo: "rayos tengo que hablar con ella" regreso corriendo pero ya no estaba al llegar, fue cuando volteo lentamente y allí estaba ella caminando a pocos centímetros de él con una mirada tan seca, triste ella lo miro fijamente es cuando los dos compartieron una mirada por unos segundos, después ella se perdió entre la multitud, Thomas solo se quedó allí parado observando como ella se alejaba paso a paso.
El viejo Tom – Después de la escuela Thomas creía que era buen momento para leer delicadamente esas historias que escribió hace ya tiempo y ver que rayos podía entender de ellas; fue al café que de la esquina, el café bueno… Le daba igual solo iba porque era tranquilo y podía estar un buen rato sin que nadie molestara (Si hablamos de Vicky y sus ataques de chica adolecente), pasaron unos minutos y el celular sonaban las notificaciones, pero decidió ignorarlo (Escucha esta rola los primeros 50 segundos mientras lees esta parte: www.youtube.com/watch?v=0IsQ29EL6tA ) luego de que una chica linda entro al lugar, tu sabes de esas chicas que no pueden ser tuyas ni en otra vida ella era delgada de ojos verdes, pelirroja como el atardecer y su caminar era sensual casi como de comercial de television, pero bueno que podemos hacer en esa situación, exacto ¡NADA! Se sentó del otro lado sola, Thomas pensó que quizá sería bueno ir y usar esos dotes oxidados de ligue, pero decidió terminar de leer la historia. Pasaron los minutos y de nuevo volvieron a sonar esas fastidiosas notificaciones, igual lo ignoro otra vez después se quedó pensando en esa chica y fija su mirada hacia donde estaba ella y allí fue cuando ella (Ahora escucha esto: www.youtube.com/watch?v=3j3okb3kuts) lo miro también y Tom oh Tom, se asustó en vez de sentirse halagado o feliz volteaba a todos lados si era al que veía intensamente hasta se apuntó a si mismo con sus manos tratando de decir “Enserio, me estas coqueteando a mi” ella sonriendo le guiño el ojo y fue cuando se levantó de su lugar y Thomas dijo “Oh mierda, allí viene, aquí viene” llega y dice “Hola, soy Liliana” que termino sonrojando al tipo; hay aceptarlo que chica llega de repente a saludarte y más así de hermosa. Pasaron un tiempo platicando aproximadamente 30 minutos cuando ella le dice “Y nos volveremos a ver Carlos” que Thomas cambio su cara feliz a una de “¡Que rayos mujer!”, “No amiga soy Thomas le dijo” ella confundida, que raro aquí dice otro nombre fue cuando saco su celular y allí estaba una foto de el en una aplicación de ligue, rápidamente pensó y dijo “Vicky” enojado y ella: “¿Qué? Soy Lili” el: “¿Qué? No nada. Bajaron sus expectativas pensando que la chica había ido a hablarle por cuenta propia, pero al parecer Victoria le jugo una broma y bueno no fue de mal gusto “con razón le había comentado que necesitaba una novia”. Pues Thomas le contó lo sucedido a Liliana y fue cuando ella se puso un poco rara y le dijo “entonces… ¿Si me darás tu número?” y el con cara idiota galán sonrojado le dijo “claro”. Lamentablemente el idiota de Thomas no escribió bien su número y no volvió a saber de ella hasta después, pero en otras circunstancias.
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