Reseña de la película Orígenes

ORÍGENES

La película inicia con una gran introducción en la que el protagonista Ian Gray nos habla de la maravilla que esconden los ojos “cada uno, un universo”, él es un hombre de ciencia, pero también un romántico. Se enamora en una fiesta durante su juventud de un par de ojos, sin si quiera conocer el rostro de la mujer a quién le pertenecían. Ian tiene una obsesión por entender el ojo humano fotografiando así millones de ellos desde una corta edad cuando descubrió que la lente de la cámara funciona igual que uno. Más adelante en su etapa de universitario centra sus estudios y su tiempo investigando el ojo, desde el más básico hasta el más complejo en una escala de 1 a 12, excluyendo el 0 por no tener pruebas de que existe. Con la llegada de su nueva Karen que es tan audaz como él, se proponen encontrar el ojo 0 y así formar parte de un descubrimiento nuevo, “el origen” desarrollando a partir de ahí un ojo hasta convertirlo en el más complejo.

Es interesante este ambiente inicial ya que por un lado puedes percibir como el protagonista está tan atrapado solo por ese par de ojos y por su proyecto del origen sin pensar en nada más, mientras que su asistente está en una posición de interés por su superior y lo fascinante que es el proyecto que ambos quieren desarrollar como un vínculo único que los une. Posterior Ian encuentra a su par de ojos de aquella fiesta como por obra del destino, cosa que le resulta muy extraño ya que al ser un hombre de ciencia no cree en lo espiritual, religión, destino, etc. pero cuando llega Sofi a su vida cada vez se pone más en duda aquello. Ella es un alma libre de la cual no sabe mucho, cree profundamente en lo espiritual y las maravillas no visibles del mundo como los milagros y la voluntad de la vida, cree que todo es como debe ser, ella no va en contra de la naturaleza.

El filme es raro incluso se podría decir extraño, algo que se salió de lo convencional tocando temas como el alma, la existencia de dios, el destino, la ciencia y por supuesto como estos son tan diferentes según la forma de pensar de cada uno de los personajes presentados. No te atrapa de inmediato te da la sensación de que será una historia más, pero se convierte en una de esas películas en las que te quedas pensando por un tiempo. Te hace reflexionar, principalmente sobre la ciencia contra la religión, las escenas están bien planteadas; en muchas de ellas se siente esa pesadez o tensión necesaria que requiere el ambiente, los actores te transmiten todo; cómo se sienten, lo que piensan, sin ser excesivos o dramáticos. Creo que los personajes están muy bien definidos y cumplen el rol que deben. En cuanto a la escenografía y los enfoques de cámara están en balance y fueron muy claros sobre todo en los aspectos como las iris de los ojos y otros detalles clave.

Si bien la historia al inicio es algo floja y aparenta ser una historia típica de amor tiene ciertos giros que son algo predecibles, pero igualmente sorprendentes y logran captar tu atención del cineasta, transformándose en algo entre lo inexplicable y la fé. Tras una serie de situaciones que van ocurriendo en la película junto al protagonista dudas de lo que es explicable con ciencia y lo que no tiene razón o lógica, se encuentra ambientada en diferentes periodos en la vida de Ian en donde entran y salen una variedad de personajes todos relevantes en la trama y que le aportan al protagonista una nueva perspectiva, dejando un final abierto a millones de interpretaciones y preguntas al aire.

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