Revolución cultural

La música, un factor esencial en la revolución cultural.

En este ensayo tratare de responder primeramente a la pregunta, ¿la música forma parte de la cultura?, tomando como apoyo el texto, definición de la cultura, escrito por Bolivar Echeverria.

Para empezar tenemos que  conocer el significado de cultura. El término cultura apareció en roma, derivada de la palabra griega paideia: “crianza de los niños” o “formación del hombre griego”. Podemos encontrar distintos significados a lo largo de la historia, incluso Echeverria hace mención de cómo se consideraba en distintos países a la cultura. Por ejemplo en Alemania la cultura va a reservarse para las actividades en las que la creatividad se muestra de manera pura, es decir, define a está como la actividad del genio creador.

“La idea de cultura en el discurso moderno se construye entorno a la convicción inamovible pero contradictoria de que hay una substancia “espiritual” vacía de contenidos o cualidades que, sin regir la vida humana ni la plenitud abigarrada de sus determinaciones, es sin embargo la prueba distintiva de su “humanidad”. Esta noción inconsistente, según la cual la vaciedad aparece como garantía de la plenitud, lo abstracto como emblema de lo concreto, constituye el núcleo de la idea de cultura en el discurso moderno.” 1

Ahora bien toca el turno de la música, según la Real Academia Española, música: es melodía, armonía y ritmo, combinados. Siendo así la música un arte, que sirve para recrear el oído. Sabemos bien que a lo largo de la historia la música ha influido de manera notable en la sociedad, incluso hasta los principales filósofos y políticos han luchado por su control. Por ejemplo el caso de Atenas y Esparta, por mencionar algunas.

1Echeverria Bolivar, Definición de la cultura (México: Itaca, 2001), pág. 26

Entonces, ¿la música forma parte dela cultura?, tomando en cuenta que la cultura como la define Echeverria es una mezcla heterogénea  que está construida a partir de un substancia espiritual y la música valorada como un factor esencial generador de cambio a lo largo de la historia en las diferentes sociedades, desde la antigüedad hasta la época contemporánea, podríamos sin duda catalogar a la música dentro de la cultura como un ingrediente más de esa plenitud abigarrada.

Bolivar Echeverria hace refencia en el texto al enfrentamiento del “existencialismo” de Jean-Paul Sartre y el “estructuralismo” de Claude Lévi-Strauss. Estas dos posiciones que han agudizado actualmente para criticar al “espiritualismo” espontaneo de la definición moderna de cultura, sin embargo parece esta esta lucha estar conectada a un estrechamiento de un impasse, que viene desde hace tiempo en el que se encuentra la crisis de las identidades comunitarias. La misma crisis ha creado una destrucción de culturas tradicionales, el sometimiento de culturas populares, y la imposición de dichas identidades, incluso a niveles nacionales, países imperialistas y capitalistas que se imponen ante países sometidos, dependientes y enajenados.

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