Análisis de contenido de la película “Rojo Amanecer”

Análisis de contenido de la película “Rojo Amanecer”

Por: Sandra Carolina Santiago Mora

La película “Rojo Amanecer” (1989), dirigida por Jorge Fons, es un testimonio que nos refleja la violencia y la represión política vivida en México en 1968. La trama sigue los trágicos eventos del movimiento estudiantil, donde los estudiantes universitarios exigían reformas políticas, sociales y educativas ante el gobierno autoritario de Gustavo Díaz Ordaz.

Uno de los momentos más impactantes es la escena en la que Luis busca desesperadamente a su hermana, herida por disparos. Esta imagen nos transmite de manera cruda la angustia y el miedo que muchos estudiantes experimentaron durante la masacre de Tlatelolco el 2 de octubre de 1968. La desesperación que se muestra en esta escena nos conecta con la realidad y la experiencia de quienes fueron víctimas de la represión.

“Rojo Amanecer” no es solo una película; sino es un testimonio que desafió el silencio impuesto por años. Es una obra que enfrenta la impunidad, dando voz a las víctimas e invitándonos a reflexionar sobre un capítulo oscuro en la historia de México. Como señala Gutiérrez (1991), “la película Rojo Amanecer (1989) es un claro ejemplo de cómo el cine puede ser utilizado como una herramienta política para denunciar la injusticia y la violencia.”

Los diálogos entre personajes como la madre, Miguel y Carlos nos reflejan la gravedad de la situación. En una escena tensa donde se escucha decir: "¿Qué pasó?", "No lo sé, pero debemos salir de aquí", "Están buscando a los líderes. Nos están cazando". Este intercambio capta la desesperación de los estudiantes, quienes se sintieron perseguidos y amenazados por un gobierno que intentaba silenciarlos.

La violencia, según Polit (2005), no solo destruye cuerpos, sino también memoria y futuro. Este pensamiento nos recuerda el impacto profundo e irreparable que la violencia puede tener en la sociedad, ya que la memoria colectiva tanto positiva como negativa, es un legado que define nuestra comprensión de la historia y de nosotros mismos.

La represión política se evidencia en la película cuando el gobierno usa la fuerza para silenciar a quienes protestaban contra la injusticia. Este abuso de poder es un recordatorio de que el 2 de octubre no se olvida, pues representa un acto que nunca debió ocurrir. Como afirman Monsiváis y Bonfil (1994), “el silencio es cómplice de la opresión y la represión, pero la voz puede ser el primer paso hacia la liberación.” Invitándonos de forma indirecta a romper el silencio, a alzar la voz contra la injusticia y a ser catalizadores del cambio.

La desesperanza por su parte se hace evidente en la búsqueda de seguridad y justicia en medio del caos y la represión. Es fundamental no olvidar la angustia, el miedo y la desesperación que vivieron muchos mexicanos en ese tiempo. La memoria colectiva, según De la Colina (1990), es esencial para moldear nuestra comprensión e identidad del pasado: “La historia no se repite, pero sí se reimagina en la memoria colectiva.”

Los diálogos entre personajes como Carlos y Miguel también nos muestran el profundo descontento y frustración hacia el gobierno mexicano. "El gobierno nos ha mentido, nos ha engañado. Quieren callarnos", dice Carlos, a lo que Miguel responde: "¿Qué podemos hacer? Están por todas partes". Sin embargo, Carlos insiste: "No importa, tenemos que luchar." Reflejando el anhelo de democratizar a la educación.

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