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Armadillo Documental


Enviado por   •  12 de Junio de 2013  •  1.988 Palabras (8 Páginas)  •  764 Visitas

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Este documental “Es como el futbol: uno aprende mucho en las prácticas, pero se aprende mucho más en un partido”, dice a su madre uno de los jóvenes soldados daneses que son seguidos y observados por el ojo creativo del director cinematográfico Janus Metz. Los soldados dejarán atrás la seguridad y la parsimonia que su pequeño país les ofrece para habitar durante los siguientes meses la base militar Armadillo, que le da nombre al trabajo documental.

En una breve toma en la que se puede ver un par de helicópteros surcando el árido espacio aéreo en cámara lenta, al tiempo que el sonido del rotor de las aspas se vuelve en su lentitud estéticamente violento, uno no puede hacer a un lado la reminiscencia de Coppola y su genial Apocalypse Now. Si con esta obra de 1979 Coppola logró representar la frialdad y el caos de la guerra de Vietnam a través de la ficción, Metz, conArmadillo, ha logrado un retrato no menos denso y abrasivo. Esta vez a través de la prerrogativa hiperrealista del documental. Con ello, el director danés no sólo agita los esquemas mediante los cuales se suele filmar un documental en zona de conflicto, también ha modificado la forma en la que Dinamarca ha visto su intervención bélica en Asia a lo largo de siete años.

Resulta a todas luces una actitud naif pensar que la guerra no es acerca de matar gente; aunque el Departamento de Defensa danés y, particularmente, los voceros gubernamentales han intentado de diversas formas vender la idea de que la participación de Dinamarca en Afganistán consiste en una especie de misión especial para preservar la paz. Los discursos oficiales en ocasiones han reducido las misiones de sus efectivos a actividades tan risibles como repartir dulces entre los niños afganos, auxiliar a ancianos e incapacitados a trasladarse y ayudar a reconstruir escuelas. Armadillo, pues, ha puesto al descubierto no sólo las turbulentas intimidades de una base militar en guerra, sino también —de manera indirecta— la ignorancia que prevalece en la población danesa con respecto a su aventura guerrera en territorios talibán.

Helmand es una provincia productora de opio. El noventa por ciento del opio traficado y consumido en el mundo proviene de Afganistán. De este porcentaje, cuarenta por ciento proviene de Helmand. Esto, en gran medida, ha ocasionado que grupos talibanes se aferren a su defensa. El pueblo vive literalmente entre la espada y la pared. Por un lado, las fuerzas danesas dan regalos económicos a los habitantes afganos para buscarse su amistad y, posteriormente, una eventual complicidad, mientras que por el otro existe la constante amenaza de muerte por parte de los talibanes contra sus detractores. El documental deja ver algo de este conflicto. Lo más relevante, lo que permite al espectador adentrarse de lleno en las circunstancias es la exposición de la vida diaria de un soldado en funciones. El conjunto de actividades para las que los inmaduros combatientes son entrenados como profesionales, las prácticas que llevan a cabo en el frente de batalla donde en cualquier combate de esta magnitud la primicia es matar para preservar al máximo las posibilidades de sobrevivir.

Armadillo comienza en enero de 2009 y sigue durante los siguientes seis meses a un pelotón de soldados que no superan los 21 años de edad. La historia, desde el inicio, se centra principalmente en Mads, cuyos padres se muestran en todo momento conturbados, al tiempo que él justifica y ve con anhelo el comienzo de su aventura.

Lo que en un principio parece una misión aburrida —aspecto enfatizado narrativamente a través de la curiosidad que muestran los recién llegados a Helmand al preguntar a los residentes de la base si verán algún tipo de acción—, cobra gradualmente un aspecto real. Los vaticinios que hace el comandante Rasmus muestran más adelante su fundamento: “No se preocupen, puedo asegurarles que habrá algo de acción”.

El número de confrontaciones con los talibanes —de quienes se afirma que están a sólo 800 metros de la base— aumenta conforme pasan los más de 180 días que dura la misión. Hacia el final del filme los daneses libran una batalla dura en la que varios talibanes son mortalmente abatidos y donde dos de los escandinavos resultan gravemente heridos. El episodio es frenético y violento, abundante en escenas que superan el convencionalismo de los documentales de guerra. Secuencias que no suelen ser retratadas en todo su infausto e incómodo esplendor.

Uno más de los protagonistas es Daniel: alto, tatuado y extrovertido. La figura de Daniel abraza un peso definitivo cuando, en esta última contienda, no duda en quebrantar las reglas de compromiso las que su propio comandante había explicado antes de comenzar la misión: “La defensa propia sólo se aplica si antes han sido atacados o amenazados con un arma de fuego”. La reacción de Daniel es una mezcla de catarsis y crueldad sublimada finalmente cuando logran eliminar —“liquidar”, como él mismo profiere— al grupo enemigo.

Los soldados respiran diariamente el riesgo de la muerte. El director danés diseñó un filme en el que la presión de los involucrados se incrementa lentamente a la par que la del espectador. Pareciera que algunos de los protagonistas se manejan como despiadadas máquinas de matar, lo último que se espera de ellos es que su frialdad se roce con emociones de remordimiento. Martin, el encargado de los morteros, alcanza con una de sus granadas a una niña afgana hiriéndola de muerte. En las secuencias que explican el hecho es posible observar de manera concisa las virtudes del discurso fílmico de Armadillo. En la primera toma de se observa a Martin alumbrado mediante una luz tenue que abre un círculo en la oscuridad que le rodea. El acento dramático es simple y contundente. Martin se toma la frente mientras su voz en off describe someramente las lesiones producidas por el artefacto en el cuerpo de la menor. El off de la voz concluye al ligarse al fotograma siguiente, en el que ahora se mira a Martin manteniendo esa misma conversación con el comandante. Es casi una sesión psicológica en la que el embargo emocional de

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