Don Quijote

“Don Quijote” ha sido considerado como la obra que da inicio a las novelas modernas europeas. Cervantes hoy en día es conocido como el escritor que precisa y plantea los rasgos definitorios fundamentales de esta nueva creación literaria, siendo admirado por grandes maestros de la narrativa europea, tomándolo de ejemplo y considerándolo como el creador de la novela moderna.

A pesar de que Don Quijote marcó el paso para llegar a las novelas modernas, su obra no pierde la esencia de una novela caballeresca, ya que Cervantes la escribió con el fin de parodiar a según él, las “fingidas y disparatadas historias de los libros de caballería.” Aun así, sin perder el ideal fundamental que movía al caballero, como era proteger a los desvalidos, socorrer a los necesitados y de vez en cuando encarar una pequeña aventura. Siendo Don Quijote, la última de las novela caballerescas y junto a Amadis de Gaula una de las más perfectas entre las de su tipo.

La obra se lleva a cabo con un constante humorismo que surge de la fantasía de Don Quijote hacia la realidad; de lo ridículo frente a la seriedad. Es la misma vida de Cervantes que cargada de amargura y de fracasos prefiere sonreír con melancolía ante las desventuras de su héroe. Por eso el libro el humor del libro es un humor melancólico.

Don Quijote cuenta con lo que podría ser la galería humana más extraordinaria presentada por escritor alguno, y todos relacionados sicológica, física y documentalmente con su clase social y su época. Pero en cuanto a los protagonistas principales, debemos observar que Don Quijote, además de los rasgos sociales, físicos y sicológicos presentados al inicio de la obra, va adquiriendo su personaje a medida que va actuando e interviniendo con los hechos que le presenta la vida ya que Cervantes no lo presenta totalmente realizado, sino que Don Quijote va adquiriendo su personaje a medida que camina por la vida. Él va modelándose como criatura humana, no como figura literaria rígida, fría y esquematizada sino como individuo de vida propia con sus ideales, sus valores frente al mundo con profunda humanidad.

Como co-protagonista también encontramos junto a él a Sancho Panza, un lugareño gordo y de baja estatura, opuesto físicamente a Don Quijote, ingenioso y bondadoso que aunque a veces carece de sentido práctico en ocasiones deja su egoísmo a un lado para hacer el bien a quien lo necesite. A medida que transcurre la obra se va cargando de la bondad y del idealismo que le transmite Don Quijote, por eso se puede decir que ambos personajes son complementarios en la historia. Lo que sintetizan Sancho Panza y Don Quijote en la historia son dos modos de ser en los que se resume la actitud humana.

Dulcinea del Toboso, una rústica aldeana, no muy hermosa pero llena de belleza y atractivo debido a la fantasía de Don Quijote. Esta personifica la gloria para Don Quijote. Este es un aspecto en común con las

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