EL CIELO SI EXISTE

EL CIELO SI EXISTE

La historia real de esta película pertenece a la familia Burpo y dio inicio el 27 de febrero de 2003. Colton, el hijo de casi tres años se quejó con su madre de tener un intenso dolor en su estómago. Eran los primeros síntomas de apendicitis, aunque el médico inicialmente indicó que solo se trataba de un estreñimiento estomacal. Dos días después su condición se agravó al punto de tener que ser intervenido quirúrgicamente. El día anterior los síntomas se habían escondido y la familia tomaba un descanso visitando el mariposario de Westminster, Colorado, donde se complica el niño.

La familia compuesta además por otra hija mayor a Colton recibió los más pesimistas partes médicos tras dos cirugías para intentar limpiar toda la infección del abdomen del pequeño. Su hijo enfrentaba una difícil batalla contra la muerte que lo mantuvo en el hospital casi 16 días. Sin embargo, cuando las esperanzas eran pocas el pequeño sorpresivamente comenzó a recuperarse.

Cuatro meses después del terrible episodio, Colton comenzó a compartir con sus padres experiencias vividas en el más allá. Lo primero que los sorprendió fue cuando fue capaz de describir el lugar donde ellos estaban y lo que hacían, mientras él se debatía en la sala de la cirugía. Luego les contó que había conocido a su bisabuelo y había permanecido con él durante su estancia en el cielo. El pequeño en la vida real no conociá a su bisabuelo, pero lo pudo identificar cuando sus padres le mostraron fotos de él cuando estaba joven. Durante su experiencia también vio a una hermana que la familia perdió en un aborto espontáneo y de la que los padres nunca le habían contado. Las horas críticas de Colton duraron casi siete horas, pero él dice que estuvo en el cielo por tres minutos, sin saber en realidad por qué ha dicho ese tiempo.

Pero ahí no se detuvo su relato. El hijo menor de la familia Burpo tuvo también un encuentro con Jesús.Sonia y Todd, los padres, gastaron casi tres años mostrándole centenares de fotos de Jesús, y fue solo hasta que le mostraron el retrato de la adolescente Akiane Kramarik que reconoció en esa pintura el rostro que vio de Jesús. Esta joven de 19 años es considerada una artista prodigio que comenzó a pintar de forma autodidacta desde los seis años de edad y sus obras son cotizadas. Muchas de ellas son sobre el universo, la creación o Dios, con quien dice tener una comunicación personal.

Los Burpo son una familia cristiana, el padre es un pastor y lo era a medio tiempo por la época en la que los eventos ocurrieron. Por eso no dudaron en predicar sobre el milagro ocurrido al interior de su propia familia y fue así que un pastor amigo los convidó de llevar la historia a un libro, para así compartirla con más gente. Una editorial de libros cristianos en Nashville adquirió los derechos de la historia. El libro fue escrito por el padre y la escritora

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