ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La Ciudad De Los Arboles


Enviado por   •  5 de Septiembre de 2012  •  717 Palabras (3 Páginas)  •  376 Visitas

Página 1 de 3

El Espíritu del Bosque

Aunque ya ha pasado mucho tiempo y he visto morir muchas lunas y nacer otros tantos soles, aún recuerdo como si fuera ayer la noche en la que mi vida dió un giro tan grande, que ya nada fue igual desde entonces. Todavía vive arrinconado en los pliegues de mi memoria, el recuerdo de los extraños sucesos que tendrían lugar aquella noche en la que la magia y lo desconocido me abrieron las puertas a un mundo escondido entre lo real y lo omírico.

La noche anterior recuerdo que vagaba sin rumbo fijo maldiciendo mi destino y tirándole piedras a mi mala suerte que de forma burlona se reflejaba en los charcos de una solitaria carretera abandonada. Había abandonado mi casa, mi trabajo y había renunciado al gran amor de mi vida. La idea de tirar la toalla, de renunciar a esta vida que tan mal se había portado conmigo rondaba por mi mente...

La última imagen de la que soy capaz de recordar es la de verme acurrucado junto al tronco de un árbol, luego... la nada.

No sé exactamente cuánto tiempo transcurrió, pero abrí los ojos alertado por una centelleante luz y una voz que parecía provenir del interior del árbol en el que me había quedado dormido...

Soy la magia, soy la luz

un instante de eternidad

la puerta abierta al más allá

si duermes me verás.

Si has llegado hasta aquí

cuidate de morir sin antes dejar

terminados todos tus sueños

la vida es para luchar.

La Ciudad de los Árboles

Icé mi vista y no sin esfuerzo, me incorporé estirando mis entumecidos huesos. Lo que vi me causó tal impacto que aún hoy después de tantos años hace que la sangre huya despavorida de mis venas. El paisaje había cambiado totalmente. A mí alrededor cientos de árboles de todas las clases y tamaños parecían sacudirse de encima su obligada inmovilidad. Las ramas en un ejercicio imposible arrancaban la corteza de cada árbol. Y como en un alumbramiento embrujado o un parto sobrenatural, del interior de cada árbol empezaban a asomar cabezas y cuerpos con forma humana...

De alguna forma que aún no logro entender, me encontraba en el interior de un bosque encantado. Un bosque que no estaba en los mapas, en un rincón del mundo donde la magia y la brujería moraban desde que la vida era joven.

En ese mismo instante la misma voz que me había despertado empezó a susurrar con una cadencia que jamás antes había escuchado la historia del lugar en el que me hallaba.

Estás en la Ciudad de los Árboles. Así llamamos, los que aquí moramos, a este bosque mitad purgatorio, mitad cementerio de personas que después de morir han sido condenadas a pasar el resto de su existencia convertidos en árboles. Sólo se les permite recobrar su forma humana en

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (4 Kb)
Leer 2 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com