Lo Que El Viento Se Llevó

Si a estas alturas queda alguien que no haya visto “Lo que el viento se llevó” sin duda sabe muy bien sobre que trata esta famosísima película clásica. Su protagonista, Scarlett O´Hara, ha sido el prototipo de heroína romántica, pero en la vida real ¿sería una heroína o sería simplemente una mala persona incapaz de tener amigos? Yo tengo clara la respuesta, no solo no tendría amigos sino que le resultaría imposible establecer una auténtica relación con nadie y hasta la más bondadosa Melanie acabaría alejándola de su lado pues, en el fondo, ella no es buena.

En la película vemos como la joven Scarlett solo tiene una auténtica relación de afecto y cariño que parece sincera, la que establece con su padre al que cuida y al lado del cual permanece incluso cuándo todo se vuelve difícil. Quizás porque se siente reflejada en ese hombre, que con sus mimos y consintiendo todos los caprichos creó a una mujer que en el fondo sigue siendo una niña incapaz de soportar un no por respuesta. Scarlett por momentos parece emocionarse con las reacciones de Melanie, tan buena que aunque ve los intereses que su prima tiene en el que es su marido aún la disculpa y le agradece su ayuda. Pero en el fondo lo que siente es desprecio porque confunde su bondad con debilidad y ve en el cariño que le profesa un punto débil que no duda en utilizar para intentar destruir a su familia.

Scarlett es de esas mujeres que quieren tener a la que consideran su rival cerca, para de ese modo controlar sus movimientos. No le importan los sentimientos del ambiguo Ashley, ni los de su prima. Tan solo le mueve el deseo de cumplir su capricho de juventud y seducir a un hombre con el que a todas luces jamás podría establecer una relación ni aún siendo él libre.

Tampoco ama a Reth, a pesar de que es muy parecido a ella. Tan solo lo utiliza para lograr lo que desea y es solo cuándo cree haberlo perdido que piensa que lo quiere a su lado.

En definitiva Scarlett es una mujer con un gran sentimiento de frustración, incapaz de disfrutar de lo que tiene y aspirando siempre a quimeras e ideales que en el fondo solo existen en su imaginación, llámense Ashley o Tara. Pero eso hace que se centre tanto en sí misma y en sus sentimientos que los de los demás le resulten indiferentes. Su amistad es engañosa e interesada y utiliza a la gente que le rodea para lograr sus metas.

Cómo hemos visto Scarlett es egoísta, interesada y muy poco empática con aquellos que la rodean. Confunde bondad y cariño con debilidad y amor con posesión. Es el centro de su mundo y todos los demás son piezas dispuestas para la consecución de sus objetivos. Por tanto es evidente que aunque como personaje cinematográfico posee un gran atractivo, en la vida real Scarlett sería una mala persona de la que cualquier semejante se alejaría para evita salir dañado.

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