Música En Las Películas De Terror

Primero por qué nos encantan estas películas, pues a quienes nos gusta, es porque nos sentimos atraídos por los estímulos emocionales novedosos e intensos que recibe, es decir, lo insólito-escabroso inscrito momentáneamente en la rutina diaria. Los efectos fisiológicos que experimentamos horrorizados desde la butaca son fuertes subidas de adrenalina, con dilatación de pupilas, aceleramiento cardíaco y respiratorio, y sudor frío. Todo esto es controlado por la música, que es la que da el ambiente en la película y nos da aviso de lo que se avecina, ayuda a que las escenas sean más aterradoras. Muchos directores han logrado crear auténticas joyas del cine gracias a este placer por la angustia. Han alimentado nuestros miedos gracias al manejo de imágenes y el uso indispensable de la música, brindándonos una experiencia única y excitante. Pero, donde surgió todo esto. Pues aunque no lo crean, en las películas Mudas. En los comienzos del cine mudo, las partituras utilizadas fueron a menudo improvisadas o se utilizaba música clásica o repertorio teatral. Una vez los largometrajes se hicieron habituales, la música fue recopilada en la llamada Música de Photoplay-que estaba específicamente realizada para acompañar a los films-. Esta labor era realizada por el pianista, el organista, el director de orquesta o el estudio mismo, que enviaban una "partitura" de la música que debía acompañar la película. La primera película de terror fue realizada en 1910 por J. Searle Dawley que fue la primera adaptación de la gran novela de terror Frankenstein escrita por Mary Shelley. El llamado mago del suspenso, Alfred Hitchcock, conocía muy bien las reacciones del público y como provocarlas. Una de sus frases más célebres fue: “La creación es la ciencia exacta sobre las reacciones del público”. Esto lo demuestra muy bien en películas como Los Pájaros y Psicosis. Los violines utilizados en la escena de la ducha son todo un clásico de Bernard Herrmann, el compositor de la música de esta y varias películas de Hitchcock. Herrmann logró con Hitchcock convertirse en un afamado compositor de música para cine. En la película Los pájaros trabajó como supervisor de sonido, ya que Hitchcock no quería utilizar música porque pensó que opacaría los efectos de audio. Para estos efectos utilizaron el Mixtur-Trautonium, un instrumento musical electrónico desarrollado por Oskar Sala y con el crearon esos tenebrosos sonidos de las aves que aun hoy nos ponen los pelos de punta

Otro de los temas clásicos dentro de la música del cine de suspenso o terror es Rocky Mountains, compuesta e interpretada por Wendy Carlos y Rachel Elkind para la película The shining (El resplandor) de Stanley Kubrick. Esta canción, inspirada en un himno latino del siglo XIII llamado Dies irae, aparece mientras salen los créditos iniciales de la película. Esta aún no ha empezado y ya andamos con los nervios acelerados, a la expectativa.

Charles

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