Un Ensayo Para El Bolero

Cuando era pequeña, en la cantina al lado de mi casa, la cual frecuentaban personas de mayor edad, oía una música, diferente a la común de mis tiempos, mas romántica e instrumental, y si escuchabas sus letras ellas penetraban en los oídos de tu corazón, Haciendo que tu cuerpo se moviera de un lugar a otro con singularidad. Esa hermosa música era el Bolero, el sin igualable, bolero.

Tuvo sus orígenes en España, donde fue manifestado por música de índole gitano, su nombre viene de la expresión «Volero», de volar, debido a las danzas gitanas que a veces implican movimientos agudos y rápidos que semejan el vuelo de las aves. Tiempo después, habría llegado al nuevo mundo como una compañía de baile español llevada a Cuba, donde la fusión con los ritmos africanos del Caribe dio como resultado el compás cadencioso como lo conocemos en sus acompañamientos clásicos: con unas guitarras y unos bongós, tumbadoras y maracas como percusión.

El bolero evoluciono primordialmente en Cuba, donde se mejoro, y sin perder su elegancia, se carnaval izó. Allí se fusionó y engrandeció con diversos géneros musicales, dándose como resultado subgéneros como: bolero rítmico, bolero chachachá, bolero mambo, el bolero ranchero (mezcla de bolero y mariachi mexicano), el bolero son (creación de Miguel Matamoros), el bolero moruno (bolero con mezclas gitanas e hispánicas) e inclusive la bachata, una especie de bolero originado en la República Dominicana.

El bolero como sentimiento es bailable, elegancia, sabor, pasión y alegría son algunas de las emociones que transmite esta danza. Es considerado un Baile de salón, en parejas, el ritmo de éste tiene como conformación, un compás de cuatro tiempos. Tres compases lentos y una terminación rápida.

Lamentablemente el bolero ha tenido una decadencia, la balada pop lo sustituyó en cuanto a romanticismo, y a música bailable el rock and roll, la salsa brava y el merengue ocuparon su lugar.

Las modas, el propagandismo, la sociedad, han impulsado a que el mundo piense como éste lo impone que es debido pensar, así que hoy día la gente no le importan verdaderamente sus gustos, lo que piensen o opinen les importa lo que los otros piensen por ellos y opinen positivamente de ellos , dado a todo esto la cultura en general se ha perdido, ese don que teníamos de disgustar la vida, cantar, bailar, escuchar, disfrutar cada momento, cada sonido que escuchamos, cada danza que interpretamos, se ha perdido y es así como grandes géneros como lo son el Bolero pierden importancia en éste el mundo Materialializado que hemos construido.

Sarai Melissa Quintero Tenelanda

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