11vo Mandamiento: Exportaras

El libro El 11° Mandamiento: Exportarás nos habla (para darnos referencia) desde los inicios de la exportación en México, de como el petróleo fue el primer recurso natural que utilizábamos para exportar y el único producto que se exportaba al extranjero. Aunque era importante su comercialización, hasta la fecha no se ha tomado la importancia a este recurso natural tan importante que tenemos. Volviendo al tema, México no comenzó a comercializar otros productos al extranjero hasta los 80’s, ya que nuestro país no contaba con la visión de progresar, ya después de internacionalizarse descubrieron que esto es una buena fuente de ingresos ya que la exportación es para cualquiera que ve una oportunidad de negocio en donde existe un consumo o una necesidad, es cuando descubres que también puedes exportar servicios y la verdad en estos tiempos es muy importante estar conectado al mundo, con el paso del tiempo la globalización a rebasado las expectativas y por consiguiente es necesario formar parte, así por nuestra parte podemos volvernos más competitivos, tener una mejor calidad, una visión más amplia y un panorama más abierto de oportunidades de compra-venta.

Refiriéndonos al tema de la globalización, tomando en cuenta que no tiene mucho tiempo utilizándose este término (al menos en nuestro país), fue una forma de darnos cuenta que para poder estar dentro de la globalización era necesario ser reconocidos, y la forma de ser reconocidos era dando a conocer nuestros productos y servicios, y para darlos a conocer era necesario exportarlos. Fue la forma en la que los mexicanos dieron un paso adelante para exportar, ya que de esta manera seriamos conocidos de manera positiva y mejoraríamos desde la estructura interior de la empresa hasta la forma exterior que tiene un producto. La exportación, el libro lo describe como un negocio natural que ayuda a generar utilidades, fortalece empresas y expande posibilidades. Lo importante aquí es, que si ya tomaste el reto de exportar, lo mantengas constante y no solo lo ocupes para salir de alguna crisis ya que la exportación es una forma de comercializar, el secreto está en entender las necesidades del cliente y satisfacerlas, de manera que a su vez nos ayude a mejorar y avanzar como empresa. Para poder exportar, es necesario tener el pensamiento abierto a cualquier oportunidad que pueda aparecer, no bloquearnos y quedarnos con solo ideas que están en nuestro país, estar alerta a los cambios en el mundo y a las oportunidades que se nos pongan enfrente, las primeras barreras que aparecen al momento de exportar son las que nosotros imponemos como persona.

Hablando especialmente de México en la exportación ha tenido una gran evolución debido a la creencia de evolucionar, comenzar a ver el futuro, como el ejemplo que nos pone el libro, comenzó el tren a funcionar y si algo es importante mencionar es que comenzamos a tener una mentalidad exportadora. Eso es un buen paso pero hasta la fecha muchos tienen la creencia o imaginan que la exportación es para empresas grandes y es por eso que desisten ante la idea de exportar, es necesario comenzar a enfocarse en que si la exportación se pone en práctica puede beneficiar a la empresa y la economía podría mejorar de una u otra manera, inclusive al país. Para poder exportar solo se necesita tener educación, respeto, disciplina y constancia, las empresas (nosotros) depende de que el país salga adelante y exista un negocio vivo y activo.

¿Por qué si exportar ayuda a la economía seguimos siendo un país tercermundista? Muy fácil la respuesta… mexicanos. Para el mundo y para nosotros, el mexicano tiende a ser un poco informal, nos tienen catalogados en el sinónimo de irresponsabilidad, inconciencia, entre otros términos y esto se debe a que en muy pocas ocasiones no se toma muy en serio el tema de la exportación y es que para que el termino se tome con formalidad es necesario tener respeto, constancia y dedicación, aprender hacer la exportación de forma natural como lo que vivimos a diario. Y es que las empresas mexicanas no exportan porque siguen pensando en que sus ventas son por poder y no por autoridad, hay que aprender que para exportar se exige calidad más que cantidad, competitividad y posicionamiento y es algo que en México no fue inculcado ya que gracias a la mamosa “Fayuca” que era lo que realmente no se vendía en otros países y era lo que consideraban productos de baja calidad. El mexicano debe empezar a dejar el hábito de ser conformista para poder ser competitivo y tener un buen posicionamiento en el mercado.

Para poder lograrlo es muy fácil, ya que somos vendedores por naturaleza, TODOS en general conocemos como vendernos y como vender cualquier otro producto ¿Por qué? Porque la sociedad nos ha educado de esa forma y si logramos hacerlo de persona a persona, de ciudad a ciudad, será igual si lo intentas en otro país, debido a que esto es nato. La globalización ha ayudado en esto, la apertura a otros países con diferentes idiomas, costumbres, religiones y tradiciones en el cual tenemos un mercado más variado por lo cual exportar esta en atentar contra la percepción de los mercados, comenzar hacerles creer que tienen una necesidad, se debe producir lo que se vende y no vender lo que se produce. Todo exportador y toda exportación deben estar pensados en el cliente, nunca en nosotros debido a que no son los deseos de ellos, nuestros futuros compradores. Aprendiendo a conocer los diferentes mercados que existen en el mundo lo podemos definir como lo menciona en el libro “predominancias mentales” esto nos podrá ayudar en el proceso de exportar y conocer más a fondo al cliente. Como lo mencionaba anteriormente esto es muy natural y ponerlo a practica puede resultar más fácil que lo que nosotros creemos.

Conocer al mundo al que nos estamos enfrentando hoy en día es un buen paso para comenzar a exportar, la competencia y descubrir que la competitividad esta hoy en el precio, calidad, producción, todo esto con el paso del tiempo ha cambiado y por tal motivo existen más opciones y debido a esto exigimos más.

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