7 Hábitos de los adolescentes altamente efectivos

Introducción

En este trabajo me encargaré de plasmar todo lo pertinente para explicar el libro de “Los 7 hábitos de los adolescentes altamente efectivos”.

Como su título lo indica es una serie de recomendaciones dividida en siete hábitos para así lograr una mejora personal en el lector, dirigida especialmente a los adolescentes, con un lenguaje y ejemplos que sin duda como jóvenes entendemos y disfrutamos; con la finalidad de que busquemos mejores formas de lidiar con nuestro día a día con una mejor actitud.

Cada hábito tenía un propósito en particular, y un orden casi perfecto para hacer al siguiente funcionar, se trata de crear una conciencia en los adolescentes y mostrar que realmente adolecen de algo, mostrarles la forma de quitar poco a poco esas actitudes que nos hacen no funcionar, no salir adelante de la mejor manera y estancarnos en una etapa de mediocridad en la que hará que nuestra vida se reduzca a servirle a alguien más y a cumplir las metas de otros y nunca las propias.

Habito 1: Ser proactivo.
(Yo soy la fuerza)

En este hábito aprenderemos a ser responsables de nuestras propias vidas, el ser proactivo es el primer paso para lograr llegar a la felicidad personal y por ende el cumplimiento de ciertas metas.

Las personas proactivas aprenden a tomar decisiones basándose en los valores, en otros términos se enfocan en el pensar antes de actuar, esto no sólo les da mejores resultados sino que también son capaces de aún en las peores circunstancias tomar la mejor decisión para sí mismos y su entorno, reconocen que no pueden controlar todo lo que les sucede pero sí pueden controlar lo que harán al respecto.

Cabe mencionar que un ser proactivo no es equivalente a una persona optimista, ya que los optimistas no buscan una solución inmediata a un conflicto sino que buscarían el punto positivo en él sin buscar dicha solución.

Por el contrario, existen los seres reactivos o pesimistas que piensan que la vida no tiene nada más que ofrecer, así que se sienten frustrados por no poder lograr lo que quieren, justifican su vida y no asumen las consecuencias de sus acciones sólo actúan sin responder por ellas.

Encontrar una persona reactiva es bastante fácil, la vida está llena de personas reactivas, como nos menciona en el libro haciendo alusión a un ejemplo sobre estos dos tipos de personas, los proactivos son como el agua, el agua por más que la agites jamás estará con burbujas y agitada, y los seres reactivos son como el refresco, a la menor agitación este se llenará de presión y así estará listo para explotar.

Es imposible poder lograr un buen funcionamiento de tu vida diaria  sin antes lograr dominar este hábito ya que este es la clave para poder desarrollar el resto de ellos.

Habito 2: Comenzar con el fin en la mente.
(Controla tu destino o lo hará otra persona)

Comenzar con el fin en la mente significa desarrollar una clara imagen del lugar al que pretendes llegar en tu vida, significa decir cuáles son tus valores y por ende fijarte metas personales a corto, mediano y largo plazo.

Hay dos razones del porque es importante tener un fin claro en mente; la primera es que los caminos que elijas hoy podrán afectarte permanentemente en tu vida y la segunda es que si no decides tu propio futuro alguien más lo hará por ti.

La necesidad de ser aceptado o pertenecer a un grupo es muy importante, pero con frecuencia se elige a los amigos o grupos con base en quien nos acepte y no siempre es bueno, en ocasiones es mejor no tener amigos durante un tiempo que tener a las personas equivocadas a tu lado.

Si tu no creas tu propia visión, alguien podría creártela con base a la suya y sin tener en cuenta tu meta, con frecuencia seguimos a cualquiera que este dispuesto a ser el líder sin tener en cuenta que podría no llevarte muy lejos esa decisión.

El mejor modo de vivir con un fin en la mente es un enunciado de misión personal, es como un plano de vida y pueden ser de todo tipo y variedad, pues cada persona decide como trazar su camino para así llegar a su meta.

Lo más importante que hará será abrirte los ojos a lo que realmente sería importante según tu meta y así ayudarte a tomar las decisiones adecuadas.

Convertir debilidades en fortalezas implica reconocer tus propias debilidades “La mayoría de nosotros nunca hará cosas grandes. Pero podemos hacer cosas pequeñas de forma grandiosa”- Maren Mouritsen.

Habito 3: Poner primero lo primero.
(El poder del querer y no querer)

Como se entendió al inicio del libro, ya sabemos que todos y cada uno de los hábitos van escalonados y se necesita del otro para poder tener un buen funcionamiento hasta este punto.

En esta parte aprenderemos a ponerle orden y jerarquía a cosas importantes y no importantes así como lo urgente y lo no urgente, gracias a un cuadro que contiene 4 cuadrantes en los cuales nos ubicaremos y entenderemos en que situación estamos y como desearíamos ser.

El cuadrante del tiempo que es donde contiene estos 4 cuadrantes encontraremos:

• EL MOROSO: Es aquel que deja todo a última hora, es un adicto a la urgencia ya que siempre pospone las cosas y los resultados para esto es tensión y angustia.

• EL QUE MARCA PRIORIDADES: Revisa todas las cosas que tiene que hacer y luego marca prioridades y sus resultados son el control de su vida y un buen equilibrio y alto desempeño.

• SUMISO: Le cuesta decir que no e intenta complacer a todos menos a el mismo incluso cuando el no quiera y los resultados son sentir que es la alfombra de todos y la reputación de querer complacer todos.

• FLOJO: Es la categoría del desperdicio y exceso, solo hace actividades que no son importantes ni urgentes y lo único que desea es hacer es hacer todo en exceso, los resultados de esta actitud es culpabilidad y falta de confianza hacia su persona.

En este habito aprenderemos a administrarnos con nuestros tiempos, ya que una vez que cumplamos con las cosas importantes lograremos tener incluso más tiempo para nuestros intereses personales.

Habito 4: Pensar ganar-ganar.
(La vida es un buffet de todo lo que puedas comer)

Pensar ganar-ganar es una actitud hacia la vida, implica el llevarse bien con los demás comienza con la idea de la igualdad, que nadie es inferior o superior al otro, y que nadie necesita serlo. Es el creer que todos pueden ganar, es agradable y difícil a la vez, te preocupas por el resto y su éxito y a la vez por el tuyo mismo.

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