Analisis Situacional De Las Curtiembres En El Ecuador Y En La Provincia De Tungurahua

El sector de los curtidores ha sido protagonista de varios cambios en los últimos años, se han implementado políticas públicas como la restricción de la exportación de cueros y pieles; esto con el fin de que se dé un desarrollo de la industria local de calzado e industrias afines que dependen del cuero como su principal materia prima.

Sin embargo en los últimos meses se ha registrado un notable incremento de precios en el cuero debido a la escases del mismo; Moreta (pág. s.f.) menciona que “300 000 pieles salen de forma ilegal, un 27% del total que se obtiene por el faenamiento y que se procesan en 250 curtiembres a escala nacional” (párr.2). El contrabando está afectando seriamente a la competitividad de la industria.

Al tener que enfrentar esta situación los curtidores se ven en la necesidad de buscar pieles en el mercado informal; y su adquisición se la realiza sin comprobantes como una factura o una nota de venta, lo que provoca que la cantidad de existencias respaldadas por dichos documentos sean mínimas; dando como resultado datos irreales al momento de rendir cuentas a los organismo de control.

La falta de pieles en el mercado trae como consecuencia la disminución de inventarios destinados para la venta y esto afecta a los resultados financieros que las empresas curtidoras esperan.

Tungurahua es considerada como la principal provincia dedicada a la curtiembre, y por ende es conocida también por la producción de calzado; chompas y otros productos elaborados con cuero.

La Hora (pág. s.f.) señala que “Dentro de la provincia, existen aproximadamente 25 empresas curtidoras registradas, mientras que las artesanales están alrededor de 30, distribuidas en los diversos cantones de Tungurahua”. (La Hora, 2013, pág. s.f.). (párr.10).

Pero hay que considerar que varios talleres artesanales y pequeñas empresas se han visto obligados a detener sus actividades debido a ordenanzas de reubicación, exigencias de tecnificación, impuestos y dificultades en la adquisición de créditos; lo que los ha llevado al cierre definitivo de sus negocios.

Las empresas que aún se mantienen en el mercado enfrentan un proceso de evolución; dentro del cual se encuentra la aceptación de nuevas medidas; así por ejemplo el correcto manejo de inventarios las puede llevar a poseer una ventaja competitiva sobre las demás, puesto que las existencias son la fuente de su ingreso, y el motor de sus actividades.

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