Analiss de liderazgo

A medida que vamos avanzando en nuestra vida profesional van saliendo varias dudas o disyuntivas sobre las decisiones que deberíamos tomar. Es una característica del ser humano sentirse un poco inseguro ante nuevos retos y más aún si no nos sentimos del todo preparado o creemos que podemos tener algún tropiezo si tomamos este camino. Un profesor universitario en mi etapa de pregrado me dijo una frase que me quedó grabada en mi subconsciente, él me indico que “la zona de confort es un lugar muy placentero pero que nada bueno va a florecer de ese lugar, así que cuando tengas una oportunidad de hacer algo nuevo y retador hazlo y no importa si tienes temor ya que todo lo bueno empieza con un poco de miedo”. Esto ha sido el eje para varias decisiones que he tomado en mi vida ya sea profesional o personal.

Con la experiencia obtenida en estos años puedo indicar que las oportunidades no caen del cielo, son fruto de nuestro esfuerzo por lo que debemos de estar prestos para aprovecharlas y esforzarnos para poder conseguirlas. Este esfuerzo se puede representar por nuestros estudios, nuestra experiencia laboral, por los retos y proyectos asumidos en nuestros trabajos, las investigaciones que hemos hecho sobre el sector en donde nos desempeñamos, entre otras actividades que han sumado para poder forjarnos como profesionales de alto nivel. Debemos de tener en cuenta que el camino al éxito no es fácil, vamos a tener aciertos, etapas de aprendizajes y algunas veces vamos a equivocarnos, pero es necesario que podamos aprender de estas experiencias y poder levantarnos rápidamente y sortear las dificultades que aparezcan en el camino y esto lo podremos solamente con experiencia.

Por otro lado, es necesario que nuestras decisiones sean consecuentes con nuestros valores, debemos de tener mucho cuidado del círculo con el que nos rodeamos, dado que nuestra imagen como profesionales es un invalorable y lamentablemente cualquier mala decisión nos acompañará por el resto de nuestras vidas y será muy complicado poder cambiar la percepción que tiene la gente sobre nosotros. Asimismo debemos de actuar con integridad en todos los aspectos de nuestra vida y si existe algo que no está acorde con nuestros principios debemos de cortarlo de raíz.

En resumen, siempre que tengamos que tomar una decisión se debe de evaluar los pros y los contras, en especial si la decisión está acorde con nuestros valores y principios, pero por ningún motivo podemos rechazar una oportunidad por tener miedo o decir la clásica frase “así estoy bien”, ya que la vida es muy corta y debemos de evitar arrepentirnos de riesgos no tomados. Siempre debemos de recordar que nuestro futuro y bienestar depende únicamente de nosotros.

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