COLOMBIA Y LA UNION EUROPEA UN NUEVO TLC

En los últimos años Colombia vio cómo su economía creció de manera considerable, lo que atrajo a la inversión extranjera y el aumento del movimiento comercial internacional del país, además en los últimos años Colombia ha consolidado su posición económica mundial con diferentes tratados de libre comercio (TLC), el primero de estos fue con los Estados Unidos, hace pocos meses se firmó el de Corea del Sur y ahora el país se encuentra a la espera del tratado con la Unión Europea.

En la primavera de 2010, la Comisión Europea firmó un Tratado de Libre Comercio (TLC) provisional con Colombia y el Perú. Este acuerdo prevé una apertura del mercado en el ámbito de productos, prestación de servicios e inversiones.

A pesar del cambio en las condiciones políticas en Colombia y de las reformas del gobierno Santos, como la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras, el TLC no ha estado exento de discusión. Los puntos de mayor debate alrededor de la aprobación del acuerdo son, entre otros, la situación crítica en derechos humanos, la violencia continua contra sindicalistas, el desacato de normas laborales internacionales, la carencia de sostenibilidad en cuanto a estandartes laborales, sociales y ambientales, y la integración débil de sindicatos y ONG en la supervisión de las cláusulas de derechos humanos y sostenibilidad establecidas en el acuerdo.

Según el Tratado de Lisboa, el TLC no puede entrar en vigor antes de que el Consejo de la Unión Europea y el Parlamento Europeo lo aprueben. Mientras que los ministros de comercio, en marzo de 2012, lograron un acuerdo político sobre la firma y aplicación provisional, la aprobación del Parlamento Europeo está pendiente y sigue siendo discutida.

Para este tratado el país tiene que enfrentarse con diversidad de restos, ya que Colombia tiene severos rezagos en infraestructura y en la preparación de su aparato productivo para lograr una inserción exitosa en los mercados internacionales. Al entrar en vigencia el TLC entre Colombia y la Unión Europea puede producirse un cuello de botella por las limitaciones en infraestructura, que impediría aprovechar al máximo el tratado comercial.

“Según el Ministerio de Comercio Exterior, en los últimos ocho años, el volumen de exportaciones colombianas a este mercado se duplicó, pasando de cerca de US$2.000 millones en el 2002, a más de US$4.700 millones en el 2009, siendo este valor el 14% del total exportado. Así, la UE representa en la actualidad el segundo socio comercial del país después de Estados Unidos” (Callejas, 2010), razón por la que el gobierno está priorizando la firma de este tratado, esperando resultados positivos, ya que Colombia está siguiendo un modelo de crecimiento al que siguió China hace varios años, al abrir sus puertas al comercio mundial.

Colombia no ha logrado resolver a lo largo de su historia la concentración improductiva de las

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