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CONSPIRACIÓN E INDEPENDENCIA DE MEXICO


Enviado por   •  14 de Junio de 2017  •  Trabajo  •  4.031 Palabras (17 Páginas)  •  237 Visitas

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CONSPIRACIÓN E INDEPENDENCIA DE MEXICO

PERSONAJES:

HOMBRES:

Miguel Domínguez Ignacio Allende Juan Aldama Ignacio Pérez Miguel Hidalgo Agustín de Iturbide Pedro Advincula de la Vega Andrés Quintana Roo Campesino Representante de los armeros Vizcaínos

MUJERES:

Narradora Josefa Ortiz de Domínguez Sirvienta María Ignacia Rodríguez de Velasco (La güera Rodríguez) Gertrudis Bocanegra Leona Vicario

PRIMERA ESCENA: Antecedentes

NARRADORA: Esta etapa comienza a principios de la década entre 1800 y 1810, cuando los colonos de la Nueva España, incluyendo a los ricos, criollos, indígenas y latifundistas, ya no deseaban compartir la riqueza del nuevo pueblo con los españoles a quienes también se llamaba "gachupines", además que dentro de la Nueva España había mucha desigualdad social, éste era el pretexto principal para pensar en la Independencia.

Una de las conspiraciones más importantes surgió en 1810 en Querétaro comandada por el corregidor Miguel Domínguez, un día en una reunión en su casa a la que asistieron Juan Aldama, Ignacio Allende y su esposa Josefa Ortiz de Domínguez sucedió lo siguiente:

JUAN ALDAMA: (caminando de un lado hacia otro y con un tono exaltado) Es necesario cambiar el destino de la Nueva España, ¡no podemos permitir que nos sigan menospreciando!, todos somos iguales y debemos luchar por conseguir la independencia y nuestra libertad-

IGNACIO ALLENDE: (moviendo la cabeza afirmando lo dicho por el anterior) Tienes mucha razón por lo que he invitado al cura de Dolores Don Miguel Hidalgo y Costilla a que se una al movimiento, puesto que el pueblo es un fiel seguidor de la iglesia y no dudará en apoyarlo, así que estaremos en continuo contacto con él.

JOSEFA ORTIZ DE DOMÍNGUEZ: Mi esposo no está muy de acuerdo con esto, sin embargo yo apoyaré en lo que sea necesario, (exclamando y mirando hacia el cielo, con una mano sobre el pecho) yo sé que Dios es justo y comprenderá mis acciones ¡estoy dispuesta a dar mi vida si es necesario para liberar a mi pueblo de la indignante situación en que vive! Y hacer que se respeten sus derechos.

IGNACIO ALLENDE: Debemos fijar una fecha para iniciar el movimiento.

JUAN ALDAMA: Si, creo que lo más conveniente es que sea en octubre.

JOSEFA ORTIZ DE DOMÍNGUEZ: Si a principios del mes.

IGNACIO ALLENDE: El padre Hidalgo y yo hemos conversado sobre ello y creemos que el día indicado es el 2 de octubre del año en curso en San Juan de los Lagos Jalisco.

JUAN ALDAMA: Así será entonces, seguiremos en contacto y nos veremos en la próxima reunión.

JOSEFA ORTIZ DE DOMINGUEZ: Hasta pronto gentiles caballeros (despidiendo en la puerta a Allende y Aldama).

SEGUNDA ESCENA: Descubrimiento de la conspiración.

NARRADORA: Con lo que no contaban Allende y los demás es que la conspiración sería descubierta y denunciada por el empleado de correos José Mariano Galván, por lo que el 13 de septiembre de 1810 se informó al Juez Rafael Gil de León de lo sucedido y a su vez este puso al tanto al corregidor Domínguez.

MIGUEL DOMÍNGUEZ: (Llegando exaltado a su casa, tomando fuertemente de los brazos a Josefa y sacudiéndola) ¡Han descubierto todo Josefa!, (suelta a Josefa y lleva sus maños hasta su cabeza, en signo de desesperación), estamos perdidos ahora tendré que mandar a encarcelar a todos los implicados.

JOSEFA ORTIZ DE DOMÍNGUEZ: (arrodillándose y llorando ante su esposo) ¡No puedes hacer eso!, piensa en todos los indígenas que viven como esclavos, en la desigualdad que se vive, no lo hagas por favor.

MIGUEL DOMÍNGUEZ: (gritándole a Josefa y levantándola del suelo fuertemente) ¡No insistas desde el principio te dije que esto no iba a salir bien!, (saliendo de la casa y cerrando con llave para evitar que Josefa salga) así que me voy a cumplir con mi deber, pero tú te quedas aquí y no saldrás hasta que yo vuelva.

NARRADORA: El alcalde Ignacio Pérez, por razón de su empleo, vivía en el entresueldo de la casa del corregidor, casa en cuya parte baja estaba situada la cárcel de la ciudad; se encontraba en su habitación cuando oyó dar en el techo los tres toques convenidos con la corregidora y que significaban la ocurrencia de algún suceso importante: acudió a saber de lo que se trataba, pero como el zaguán había sido cerrado con llave por Domínguez, Doña Josefa se acercó a la puerta y a través del agujero de la llave puso a Pérez al tanto de lo que ocurría.

IGNACIO PÉREZ: (acercándose a la puerta para escuchar y hablando en un tono bajo) Dígame señora ¿en qué puedo servirle? ¿Qué pasa?

JOSEFA ORTIZ DE DOMÍNGUEZ: (hablando rápido y desesperada, pasando por debajo de la puerta una nota) La conspiración ha sido descubierta tienes que llevar

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