ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Conócete a ti mismo


Enviado por   •  12 de Septiembre de 2011  •  Documentos de Investigación  •  761 Palabras (4 Páginas)  •  936 Visitas

Página 1 de 4

escritura fragmentaria

A imitación de las Obras morales del griego Plutarco (46-120), Montaigne concibe sus Ensayos como una "marquetería mal unida", y reivindica su desorden como prenda de su libertad y de su "buena fe". Este desorden se debe también al propio modo de escribir los Ensayos: Montaigne pensaba en voz alta y un secretario (existieron tres sucesivos) tomaba nota del dictado.1 Al preferir antes que la organización didáctica y antes que a la retórica de los pedantes un "aspecto poético, a saltos y a brincos", apuesta por la prosa abigarrada y diversa. Los 107 Ensayos sorprenden por esa razón por su variedad y por los contrastes que contienen. Si los más breves (especialmente en el libro I) son solamente notas de lectura que yuxtaponen en una o dos páginas algunas anécdotas comentadas brevemente, otras forman auténticos ensayos filosóficos, de inspiración estoica ("Porque filosofar es aprender a morir", I, 20) o escéptica ("Apología de Raimond Sebond", II, 12), cada vez más llenos de confidencias personales ("Sobre la vanidad", III, 9; "Sobre la experiencia", III, 13).

A la variedad de formas corresponde la de temas: Montaigne, afirmando "hablar sin preocuparse de todo lo que se presenta ante su fantasía", pasa sin transición de los "caníbales" (I, 31) a los "mandatos divinos" (I, 32), de los "olores" (I, 60) a las "oraciones" (I, 61). Algunos títulos engañosos esconden los capítulos más audaces: "Costumbre de la isla de Cea" (II, 3) discute la legitimidad del suicidio; "Sobre el parecido de los hijos con los padres" (II, 37) ataca a los médicos; "Sobre unos versos de Virgilio" (III, 5) incluye las confesiones de Montaigne acerca de su experiencia sobre el amor y la sexualidad; "Sobre las marcas" (III, 6) denuncia la barbarie de los conquistadores europeos...

Son también muy diversas las innumerables fuentes que Montaigne opone, las autoridades tradicionales del humanismo a su experiencia individual: si Plutarco y Séneca son sus autores predilectos, no por ello deja de lado a historiadores y poetas: cientos de citas en prosa o en verso, en francés y en latín, a menudo hábilmente modificadas, componen un texto a muchas voces. Lejos de constituir un adorno gratuito o una autoridad paralizada, este omnipresente intertexto ilustra o apela a la reflexión: "No digo a los demás salvo para afirmar tanto más lo que digo yo".

[editar] "Conócete a ti mismo"

La unidad de los Ensayos reside en el procedimiento original que hace de la investigación filosófica el espejo del autor: "Es a mí a quien pinto." Sea cual sea el tema tratado, el objetivo buscado es el conocimiento de sí mismo, la evaluación de su propio juicio, la profundización

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (5 Kb)
Leer 3 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com