ENCLAVE BANANERO

ENCLAVE BANANEROENCLAVE MINERO

Las minas que hoy se conocen como Minas de San Juancito y El Rosario, fueron explotadas por los Indios Chorotegas, que estaban asentados en la Cuenca del Río Chorotega, en aquel tiempo se conocían como minas de Tegucigalpa, que en dialecto autóctono significa “Cerro de Plata”. Cuando los españoles colonizaron la región comenzó de nuevo la explotación, fundándose la ciudad de Tegucigalpa en el año de 1580.

Sucesivamente estas minas pasaron a poder privado, siendo sus propietarios los señores Pedro Moncada, Domingo Girón y su hija Dominga Girón sin embargo, debido a que los dueños no tenían capital para explotarlas fueron donadas al gobierno.

En 1885 durante el período la Rosario Mining Company de Nueva Cork recibió una concesión a cambio de la construcción de 33 Km. de carretera de Tegucigalpa a San Juancito. La concesión tuvo un gran impacto en la economía local representando también un cambio en el uso del suelo y actividad económica local debido a que el área concesionada era utilizada para agricultura. Posteriormente la zona se convierte en un poderoso enclave económico a nivel regional y nacional.

Una serie de acontecimientos que a la vez son indicadores de desarrollo socioeconómico tuvieron lugar en San Juancito; por ejemplo fue la primera comunidad hondureña que contó con energía eléctrica, se construyó también la primera represa para abastecimiento de agua a Tegucigalpa, la red de comunicación telefónica (conectando Tegucigalpa, San Juancito, Valle de Ángeles, Santa Lucía y San Antonio de Oriente, todos sitios con explotación de mineral en el momento) así como comercio a nivel de Europa y Asia. Agregando a esto el establecimiento en la zona del Rosario del primer consulado de Estados Unidos de Norteamérica en Honduras.

Edificio Primer Consulado de EEUU en Honduras, San Juancito

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