ENSAYO ESTADO DEL ARTE DE LA ADMINISTRACIÓN

EL ESTADO DEL ARTE DE LA TEORÍA ADMINISTRATIVA

Desde mi parecer la administración es una competencia nata de los seres vivos pues todo los que hacemos son secuencias ordenadas de acciones para cumplir objetivos y en cada acción hacemos uso de recursos que nos dan facilidades. Estas actividades en sociedad fueron evolucionando junto con la capacidad de raciocinio de los humanos. Hemos pasado de ser primitivo que se organizaba de acuerdo las características fisiológicas para llevar a cabo actividades que les permitieran la supervivencia, posteriormente con cumulo de conocimientos y las herramientas que facilitaban tareas básicas como la obtención de alimentos, prendas para vestir y la transmisión de experiencia a las nuevas generaciones, la sociedad fue evolucionando en sus formas de producción, de intercambio y de educación, dejando así el espectro empírico de la  administración como esas pequeñas acciones que hacen que la vida diaria tenga orden y evolucione.

Retomando lo visto de las primeras sesiones, puedo anexar que las primeras civilizaciones de las que se tiene registro de la administración inmersa en los proceso de producción y mercantil son el fundamento sustancial de la necesidad básica de trabajar en colaboración con quienes poseen recursos y habilidades que difieren y complementan a los propios, sin embargo, la administración, los medios de producción y las relaciones comerciales al ser acciones humanas quedan sujetas al estado de ánimo cambiante, al instinto predominante y a las necesidades momentáneas, con esto refiero a que las formas de mercantileo al inicio de las sociedades pudieron quedar en la buena ultranza del bien común, pero nada puede permanecer igual que un inicio, toda condición es efímera, sobre todo las capacidades cognitivas humanas, pues se ha evolucionado aceleradamente y con ello toda acción que depende de la mano del humano ha sufrido modificaciones, tal es el caso del intercambio de bienes y servicios entre sociedades, es claro que a mayores capacidades humanas, los resultados de los procesos tiene un impacto superior. Socialmente hemos pasado del trabajo colaborativo, al intercambio de bienes con bienes y de ahí al intercambio de bienes y servicios por una remuneración dando así un valor monetario a lo que en teoría cubre las necesidades, actualmente estamos inmersos en una era de consumismo masivo, donde lo que facilita la vida en ocasiones es innecesariamente costoso o necesariamente inaccesible para quienes no cuentan con la consistencia económica y sin ganas de entrar en palabrerías de tintes marxistas o con cualquier ideología político-económica, la reflexión de todo esto es, que la administración y la educación, en su amplia esfera aplicativa para cada acción que el humano ha desarrollado y evolucionado a lo largo de la historia, son también quienes han justificado las segmentaciones sociales. El ser humano como individuo es diverso, con características que le hacen diferente a otros, no sólo en lo biológico, también en las aptitudes natas que le permiten decidir su campo de especialización y sus acciones laborales, pero también es una realidad que la sociedad en que se desarrolla puede ser una condicionante de su riqueza cognitiva y económica que a lo largo de su vida le permitirá o le negará el acceso a ese intercambio de bienes y servicios con mayor o menor calidad.

A lo largo de la historia hemos tenido a empresarios y estudiosos que le han dado nombre y significado a la administración, pasó de ser una serie de acciones natas para la supervivencia (instinto natural), para tener una estructura de análisis basada en el método científico que, en coadyuvancia de las ciencias en auge de cada época y con el enfoque de cada teórico, genere un bienestar mayor al de meros instintos de satisfacción natural, con la llegada de las escuelas de pensamiento, el método científico y el incremento de población, el trabajo artesanal debió pasar a la elaboración en masa y con ello al dar resultados en menor tiempo, de igual forma el conocimiento o la monopolización de los bienes y servicios comenzó a distribuirse generando así competencia que a su vez activó en el cerebro humano ya no sólo el evolucionar ´para satisfacer necesidades de unos cuantos, si no para ser mejor que el otro y tener mayor cuantía de riquezas.  

Hablando de que los humanos evolucionamos, aumentamos el número de población y con ello las partes reptilianas del cerebro dieron pie al desarrollo de la competitividad, también se suma el hecho de que la educación y la ciencia fueron aportes significativos para hacer de los instintos básicos, ideas estructuradas emocionalmente complejas y estratégicamente ordenadas para hacer del bien común el negocio que enriquecerá a quienes tiene ese acceso a la emancipación del pensamiento.

No es de extrañarse que sea un ingeniero y economista quien detone lo que hoy conocemos como administración, el patrón es similar para cada momento de aprendizaje y evolución: primero contamos con una necesidad a satisfacer, puede ser física o emocional o social, posterior el bagaje de esta persona busca integrarse y complementarse con nuevos conocimientos para que finalmente esa necesidad quede satisfecha. Y no es lo mismo satisfacer una necesidad en la época de los inicios de la humanidad que en la época donde el acceso a la educación y por ende al método científico fueron el privilegio de unos cuantos, tampoco es lo mismo hablar de la administración de 1903 a la actual, pues reitero, todo cambia, todo acaba, todo renace en función de la vida en sociedad.

La administración pasa aún por la discusión de ser una ciencia o un arte o una disciplina, y como lo mencioné al principio, para mi es lo que hoy se conoce como una competencia de la vida diaria, todos somos administradores de nuestra vida, pasamos a ser administradores especializados con el estudio y comprensión de la relevancia de la administración en la vida social, repetimos el ciclo, pasamos de lo empírico a lo científico.

En retrospección, los humanos tenemos esa propensión natural a organizarnos, delegamos la autoridad a unos cuantos para que lidereen las acciones colectivas, hacemos uso de los recursos disponibles y si es necesario se adquieren o desarrollan, las emociones son un factor que no se puede dejar de lado pues influye e influyen a nuestro favor o en contra con base en ellos, de igual forma el tiempo y los resultados son el enlace perfecto para determinar la viabilidad de quienes colaboran y de quienes pudieran sumarse. En un aspecto más concreto y basado en el estudio de la administración, Frederick Taylor, es quien nos dice al mundo que tenemos patrones de comportamiento organizacional que pueden ser mejorados, nos lleva al uso del método científico para determinar secuencias temporales de producción basadas en la comprensión de las acciones, como ejemplo expreso el caso personal al aprender un arte marcial, primero mecanizamos los movimientos, educamos al cuerpo y posteriormente se interioriza el significado de cada movimiento, creando así un aprendizaje significativo y funcional. Taylor con la convicción de la racionalidad del trabajo, la relación de tiempos y movimientos, la motivación económica y el término de eficiencia y eficacia para la productividad, dio los primeros pasos para desatar la carrera del estudio de las organizaciones, con el paso del tiempo, con la celeridad de las necesidades sociales tenemos a otro teórico administrativo Henry Fayol, ingeniero del siglo XX, suma a los estudios de las organizaciones los principios de la administración, hace visible el elemento central del éxito o fracaso de las organizaciones, con ello inicia la comprensión de las estructuras organizacionales, da al trabajador el perfil de actividades a realizar según sus funciones, determinando así que el administrador existe y lleva a cabo actividades transversales que afectan de manera positiva o negativa la organización y finalmente llegan los cimientos de la administración con sus catorce principios.

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