ENSAYO PODER OCULTO DE LA PRODUCTIVIDAD.

ENSAYO

EL PODER OCULTO DE LA PRODUCTIVIDAD

Paula Andrea Torres Pacheco

Sandra Daniela Báez Díaz

Mauro Ferney Sosa Cubides

La productividad es considerada como la combinación de eficiencia y efectividad, las cuales adoptan aspectos internos y externos de la organización, que a su vez si fallan, perjudican de manera notable a la compañía, pero que por el contrario al ser ejecutadas de manera precisa, el  nivel de productividad aumenta satisfactoriamente, como lo quiere plasmar William Bohan en “El poder oculto de la productividad”.

Hay que tener en cuenta que para conseguir un alto nivel de productividad, el capital humano, el capital financiero, la tecnología, y la planeación son elementos claves para llevarla a cabo dentro de la organización, de igual manera escuchar las opiniones de cualquier trabajador sin importar su nivel dentro de la organización es de vital importancia para llevar a cabo la ejecución de un plan que sea efectivo para mejorar la productividad de la compañía.

En las organizaciones se debe tener en cuenta diferentes aspectos internos que pueden estar afectando la productividad, pero que son en gran parte decisiones del nivel gerencial, por falta de capacitaciones al personal, inversión en cuanto a maquinaria necesaria para la fabricación, un control de la producción y crear plantas adecuadas para llevar a cabo las operaciones; y como lo explicaba Bohan en su libro, muchas de esas decisiones se dan porque el encargado de la compañía no escucha opiniones y quizás soluciones por parte de sus empleados, ya que esto podría “bajar” su nivel de autoridad dentro de esta.

Teniendo en cuenta las anecdotas narradas por el autor, se conoce en hechos reales lo que sucede en una organización internamente, se puede inferir en todos los aspectos a considerar para mejorar la productividad y reducir todas las mudas, por ejemplo, llevó al despido de personal hasta llegar a reducirlo a la 4 parte de la fuerza laboral inicial; pero este método se volvió bastante popular, pero se tenían que ajustar los tiempos, ya que para algunas situaciones los intervalos eran demasiado cortos, otras variables tambien influian como la ubicación geográfica y el clima que afectan a esta técnica la cual fue llamada Programación a Intervalos Cortos (Short Interval Scheduling, o SIS); adicional a esto también se observó que este metodo es susceptible a la percepción externa, a las características del clima organizacional; lo bueno de éste, es la velocidad con la que los resultados pueden ser estudiados y así lograr hacer los ajustes necesarios, lo negativo era la tendencia a despedir entre el 20 y el 30 por ciento de los trabajadores, y esto, a pesar de considerarse una estrategia para ser altamente efectivo, se convierte en una técnica nada popular ante los colaboradores y poco eficiente debido a la alta rotacion. Este método podría funcionar en empresas que sean nuevas, ya que al organizar los procedimientos antes de contratar el personal se evitara el alto indice de despido; pero en el método está implícito que es aplicable a compañías con buena presencia en el mercado, es decir, que tengan clientes.

Pero con el tiempo, y la concientización de los consultores, se logró diseñar un taller de corta duración, donde se les enseña a la parte gerencial a asignar los recursos humanos necesarios y reducir al maximo las mudas para una óptima productividad, y  así no tener que despedir a las personas, puesto que antes se óptimizaba un área de producción sin tener en cuenta las capacidades del capital humano de cada área.

Sin importar que tanto tiempo lleve una empresa en el mercado, se requerirá, siempre, de la adaptación, ya que estamos en un mundo, y así mismo en un mercado, cambiante, tal es el caso que nos plantea el autor, donde una fabrica de balones, Sports Ball Inc., donde se evidencia su éxito al rebasar su productividad, y en muchos casos aumentó costos para cumplir con las cuotas. Es así que el dueño decide contratar un nuevo gerente de produccion para cambiar esta posición, situación que es resuelta pero solo de manera polarizada, es decir, se aumentó la producción pero los ingresos se ven afectados por la disminución en el precio de venta, y un mal manejo de cantidades de producción; es necesario mencionar, que por mejor que parezca una opción siempre es bueno profundizar en la información, y calcular todo desde diferentes perspectivas para estar seguros de tomar la decisión correcta y no la que, en papel, parece mas atractiva. También se tiene que tener en cuenta el factor humano, las implicaciones personales que pueden formular posibles soluciones, ya que estas propuestas se pueden ver influenciadas por la situación personal del equipo, con respecto a factores tales como bonificaciones, estados emocionales, e inclusive, la percepción que se tenga del líder de equipo.

En cualquier organización, sin importar la naturaleza de esta, se requiere una forma de medir la productividad, esta tiene que ser común, sin importar las diferencias en los productos que la empresa fabrique, además tiene que ser exacta para así poder planear, organizar y programar fechas de entrega realistas; con esta medida se puede calcular la oscilación de la productividad en el tiempo para poder hacer las correcciones pertinentes.

Evidentemente la manera para proponer una unidad de medida general empezará desde el autoconocimiento de los factores que afectan el proceso productivo para así identificar qué elementos  dentro del procedimiento hacen más susceptibles a los resultados, ya que no siempre aumentar la fuerza laboral y adquirir maquinaria nueva es la solución más efectiva.

Detectando factores claves a la hora de medir la productividad, por ejemplo el tiempo que se pierde en actividades que se realizan pero que no agregan valor al producto final, éste puede indicar que tan bien se está operando con la capacidad actual, otros factores como la pérdida de materia prima, la satisfacción del cliente y el tiempo de ocio dentro de la fábrica son puntos históricos que debemos conservar para posteriores comparaciones y así saber las mejoras que a sufrido el sistema, inclusive para saber si contrario a lo planeado el sistema ha empeorado.

Para definir el buen proceder del área de producción, primero se consideran algunos conceptos, los cuales son: muda, referente a cualquier actividad proceso u operación que no agrega valor al producto; y, VAC o Valor Agregado para el Cliente, siendo esta última lo contraria a muda. Estos últimos conceptos son importantes ya que se debe entender que lo que los clientes desean es algo que agregue valor a sus vidas, y bajo esta premisa se puede definir la diferencia entre actividad y productividad, lo cual no debe confundirse, siendo la primera, la serie de tareas que se realizan en una empresa y la segunda, los resultados que las distintas actividades puden obtener en la organización teniendo en cuenta los medios empleados de toda indole para obtenerla en un periodo de tiempo determinado, es decir, la acogida por parte del cliente del producto o servicio.

...