El Dinero Y La Ley De La Atraccion

El dinero y la Ley de Atracción : Como aprender a atraer Prosperidad, Salud y Felicidad

Prefacio

Jerry Hicks

¿Qué cree que le atrajo hacia este libro? ¿Por qué supone que usted lee estas palabras?

¿Qué parte del título le llamo la atención? ¿Dinero? ¿Salud? ¿Felicidad? ¿Aprender a atraer? ¿O quizás fue la Ley de Atracción?

Cualquiera que haya sido la razón obvia que le haya llamado la atención hacia este libro, la información aquí contenida le ha llegado como respuesta a algo que Vd. ha estado pidiendo

De que se trata este libro? Le enseña que se supone que se sienta bien en su vida y que nuestro bienestar general es algo natural. Le enseña que no importa lo buena que sea su vida en este momento siempre puede ser mejor y que usted controla la decisión y el poder de mejorar sus experiencias y le ofrece herramientas filosóficas prácticas, que al ponerlas en uso consciente le permitirán disfrutar más de la salud, la prosperidad y de la felicidad que son su derecho natural de nacimiento. (Y lo sé porque me ocurre todo el tiempo mientras paso por una experiencia contrastante que aclara mis deseos, produciendo un nuevo deseo y luego una nueva manifestación. Mi vida en general mejora cada vez más.)

¡La vida es maravillosa¡ Es el primer día del año 2008 Y estoy comenzado a escribir este prefacio sentado en el comedor de nuestro recién adquirido paraíso en del Mar, California.

Desde la época en que Esther y yo nos casamos en 1980 nos fascinaba a visitar este “jardín del edén” cada vez que podíamos, y ahora después de todos estos años como turistas apreciando San Diego, vamos a vivir aquí parte de nuestro tiempo como residentes agradecidos

¿Y cómo no sentirnos agradecidos? Primero por nuestro amigo que nos condujo a esta propiedad, (le dijimos que estábamos buscando una propiedad cerca del Del mar donde pudiéramos estacionar nuestro autobús que mide casi 14 mts. de largo) luego con los arquitectos, paisajistas, ingenieros, diseñadores, carpinteros, electricistas, fontaneros, constructores de tejados y trabajadores de acanalados de cobre. Después con todos esos comerciantes talentosos y habilidosos, los que revistieron los pisos de azulejos, aquellos

que aplicaron el estuco, con los pintores y los herreros, creadores de rejas y portales, además con los que instalaron los pisos, las puertas deslizantes personalizadas, las ventanas y puertas de madera con arcos con vitrales

Y con las personas altamente calificadas que instalaron los equipos sofisticados, el sistema de iluminación con control maestro marca Lutron. El sistema informático de red de computadoras, audio y video, el aire acondicionado nuevo y silencioso marca TRANE

para zonas múltiples con control maestro. Y la cocina, y la lavadora y secadora, marcas Snaidero/Miele/Bosch/Viking.

También con aquellos equipos de laboriosos trabajadores que realizaron

transportaron lo necesario, vertieron el cemento, pusieron las piedras y trasplantaron los enormes arboles y finalmente los miles de personas que participaron y ganaron dinero por la intervención, creación y la distribución de todos los productos involucrados .

En conclusión tenemos mucho que agradecer y esto es nada mas que la punta del iceberg de todo lo que tenemos para apreciar. Como el descubrimiento de un nuevo restaurante “favorito”, sus propietarios y el personal, a solo unos minutos de distancia, y luego esos vecinos increíblemente encantadores, eclécticos y positivos, que nos dieron la bienvenida en un estilo que jamás había experimentado antes.

Y todavía hay mas, la vista deslumbrante al Sur de la primitiva Torrey Pines, al otro lado del Carmel Valley Creak y del santuario de aves acuáticas y la laguna y mas allá la espuma y la grandiosa cresta de las olas rompiéndose en el Océano Pacifico mientras bañan incansablemente la playa de Torrey Pines.

Si, ¡La vida es hermosa¡.

(Esther y yo acabamos de dar un breve paseo por la playa y ahora nos estamos aquietando mientras nos preparamos para ponerle los toques finales al nuevo libro de Abraham, El dinero y la Ley de la Atracción: Como aprender para Atraer Prosperidad, Salud y Felicidad)

Fue hace mas de 40 años cuando mientras daba una serie de conciertos en Universidades del País, advertí accidentalmente un libro sobre una mesa en la sala de un motel de un pequeño pueblo de Montana, este libro llamado “Piense y Hágase Rico” de Napoleón Hill, cambió mis creencias sobre el dinero, de forma tan dramática, que cuando utilicé sus principios atraje el éxito financiero a mi vida de formas que jamás había imaginado posibles.

Pensar en hacerme rico no era algo en lo que había estado muy interesado, pero poco después de descubrir este libro, decidí que deseaba modificar la forma en que ganaba dinero e incrementar la cantidad que recibía. Resulto que la atracción hacia el libro de Hill había sido la respuesta directa a lo que yo había estado pidiendo.

Poco después de mi encuentro con “Píense y hágase rico” en ese hotel de Montana, conocí un hombre en un hotel de Minnesota quien me ofreció una oportunidad de hacer negocios tan compatible con las enseñanzas de Hill que durante 9 gozosos años enfoqué mi atención en construir estos negocios. Después de estos nueve años, el negocio creció hasta convertirse en una empresa internacional de millones de dólares. Y en este periodo de tiempo relativamente corto mis finanzas pasaron de tener justo lo necesario, lo cual era lo que había deseado hasta entonces, a alcanzar todas mis nuevas metas financieras recién inspiradas

Lo que aprendí del libro de Hill funcionó de forma tan grandiosa para mí que comencé a utilizar este trabajo como un libro de texto para compartir sus principios del éxito con mis colegas. Pero en retrospectiva a pesar de lo extremadamente bien que las enseñanzas funcionaban en mi caso, me di cuenta de que solamente dos de mis colegas habían obtenido el enorme éxito financiero que yo deseaba para todos ellos. Y así fue que comencé a buscar otro nivel de respuesta que fuera más efectivo para un rango más amplio de personas.

Como resultado de mi experiencia personal con “Piense y hágase rico” llegué a convencerme del logro del éxito era algo que podía aprenderse. No teníamos que haber nacido en una familia que ya hubiera descubierto como ganar dinero. No teníamos que sacar buenas calificaciones en la escuela, ni conocer a las personas apropiadas,

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