El secreto de un buen liderazgo

1. ¿Te has encontrado alguna vez con una situación parecida?

Si, en el caso de supervisiones:

1. ¿Dónde crees que reside el verdadero problema de esta situación?
2. ¿Cómo podría este directivo convertirse en un mejor líder?
3. ¿Encuentras alguna moraleja para esta historia?
4. ¿Cuál es el problema al que se enfrenta el joven líder y qué se evidencia en sus acciones?
5. Defina los criterios establecidos por el líder para relacionarse con sus colaboradores en especial lo stakeholders en general (principios, políticas e instrucciones).
6. Busque una solución que aborde el problema definido en la pregunt1a.
7. A partir de lo visto en el curso, y desde su perspectiva: ¿cómo podría aportar la comunicación estratégica a este líder, tanto en la forma como en el fondo, para que esta empresa no volviera a cometer las debilidades.

1. ¿Cómo podría este directivo convertirse en un mejor líder?

En base al planteamiento del problema dado en el presente caso, se evidencia que, pese al liderazgo demostrado por el joven directivo, su gestión de emociones no estaban alineadas. La inteligencia emocional y el liderazgo están estrechamente ligados para conseguir llegar a ser un buen líder. Son dos características fundamentales que cualquier jefe de equipo o directivo de una empresa debe tener. Se trata de la capacidad que posee una persona para comprender y manejar sus emociones de manera que estas no perjudiquen sus objetivos profesionales.

El joven directivo necesita dominar diversos aspectos relacionados con el desarrollo de la inteligencia emocional, dentro de ellos el autoconocimiento y el autocontrol, las cuales son dos de las principales, junto con la motivación, la empatía y las habilidades sociales.

1. ¿Encuentras alguna moraleja para esta historia?

El secreto de un buen liderazgo radica en la inteligencia emocional. Un líder sin inteligencia emocional, se convierte en una persona por fuera de flores y por dentro de temblores.

...