Evolución de la actividad comercial

Desde que comenzó la era de la digitalización y las nuevas tecnologías, la actividad comercial está en constante desarrollo, modificando así los hábitos de consumo, tanto a la hora de hacernos llegar nuevos productos o servicios como la forma cómoda de realizar un sinfín de compras.

La actividad comercial ha evolucionado en los últimos tiempos:

1. Búsqueda de empleo: hasta hace unos años, la persona que se encontraba en búsqueda de empleo activa, se dedicaba a realizar un CV en ordenados e incluso a mano, imprimir un sinfín de copias y repartirlas en mano a diversas empresas, tiendas, almacenes…. En la actualidad todo esto se realiza a través de diversas aplicaciones en la red, elaborando un CV y adjuntándolo en esas aplicaciones o páginas web donde lo solicitan. Como ejemplo tenemos a Linkedin, donde a través de un entorno virtual podemos ofrecer o demandar puestos de trabajo además de establecer contacto con diferentes personas con un objetivo común como es el mundo laboral.
2. Compra-venta de ropa: desde tu propia casa, sólo con un dispositivo capacitado para mantener una conexión a la red y que realice fotos, podemos vender ropa usada o nueva que ya no utilicemos además de comprar otra en la que estemos interesados, sin necesidad de movernos de nuestros domicilios y potenciando la economía circular, dando una segunda vida a muchas cosas.

Una empresa que comenzó vendiendo en línea en los últimos años ha podido observar como la competencia ha progresado de manera notoria por lo que han tenido que comenzar a realizar cambios en su actividad comercial implementando una serie de avances o modificaciones como pueden ser:

• Crear una página web en un entorno seguro, además de hacerla atractiva e intuitiva para los clientes que quieran realizar la compra.
• Implementar estrategias de marketing enfocadas a la captación de nuevos clientes, así como la fidelización de los que ya estaban.
• Campañas publicitarias atractivas a través de redes sociales, email marketing.
• Distintas opciones de pago así como pagos fraccionados si el importe de la compra supera un rango de precio.
• Comunicación efectiva a través de las redes sociales, donde pongamos en auge el valor de nuestro producto y porque nos diferenciamos de la competencia, poniendo en claro cuál es nuestra propuesta de valor.
• Interacción directa con los clientes, respondiendo en un espacio de tiempo prudencial a las diferentes cuestiones que nos puedan realizar, garantizando así una venta.

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