La célula como una fábrica

La célula como una fábrica

Mi fábrica llamada Cellium (la célula), se compone de una dirección, en la que se encuentra el director general (el núcleo), quien es el encargado del buen funcionamiento de toda la fábrica. Existe un generador de energía y calefacción (mitocondrias y cloroplasto), también contamos con un gran almacén al que llegan las materias primas, indispensable para elaborar nuestros productos (retículo endoplásmico). En el departamento de producción, las materias primas son transformadas en productos (ribosomas). Guardamos las materias primas que van a entrar en la cadena de producción, tenemos un equipo para los desechos de la producción (lisosomas, peroxisomas y vacuolas), contamos con otro almacén para los productos ya elaborados (aparato de Golgi), además toda la fábrica está limitada por una barrera con un sistema de vigilancia que controla la entrada y la salida de todo (cito esqueleto).

La dirección de la fábrica esta en manos del director general (el núcleo de la célula). Él almacena el ADN y guarda toda la información de la genética la cual determina las características especificas de la célula y por lo tanto todo el organismo humano. El mensajero (ARN) es quien transmite la información del director a toda la fábrica (núcleo) para la producción de proteínas fuera del núcleo. El mensajero (ARN) lleva una copia de la información encontrada en las secuencias específicas del ADN.

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