La generosidad y la caridad
Enviado por casimirooo • 1 de Junio de 2013 • 585 Palabras (3 Páginas) • 573 Visitas
LA GENEROSIDAD NO SIEMPRE ES CARIDA
La generosidad y la caridad no son lo mismo, en verdad ambas conductas son a mis ojos hermosas, pero es bueno que comprendamos la diferencia, ambas se basan en el dar, pero damos de manera diferente y en condiciones distintas.
La caridad, la podemos definir como: Virtud por la cual una persona siente compasión por los sufrimientos y las penurias de otra persona, y actúa para ayudarla y protegerla. Los actos de caridad son auténticos cuando en verdad los hacemos sin intención alguna, lo cual quiere decir no sólo que no me debes nada, ni estas en deuda conmigo, no es necesario que retribuyas lo que hice por ti, lo hice como un regalo, tu dignidad y libertad no se ven comprometidas por mi acto.
Existen personas que son caritativas y generosas, ellas están movidas por la nobleza de su carácter y la conciencia de unidad y abundancia con la que fue diseñado este planeta.
Cuando decidimos ser generosos siempre tenemos para dar porque sabemos que en efecto siempre gozamos de dar, cuando te sientes bien contigo mismo, puedes ser generoso con los demás, razón por la cual te resulta fácil y maravilloso llamar a alguien para decirle que le quieres, dar las gracias, decirle a tus seres queridos lo importante que son para ti.
Estar en armonía con el cosmos nos inclina a ser caritativos y dar de nuestro tiempo y energía para apoyar a quien en este momento nos necesita.
Son diferentes, pero muy próximos, en mi opinión, ya que creo que constituyen cualidades humanas a alabar y a destacar, y muchas veces de un alma caridad ha salido mucha generosidad.
Aunque no siempre, ya que en muchas ocasiones hemos visto a gente orgullosa que se ha mostrado desprendida y generosa en los momentos precisos y cuando es necesario.
La generosidad es la virtud de dar y compartir con los demás, de forma desprendida y magnánima y sin esperar nada a cambio.
La caridad es la virtud sobrenatural infusa por la que la persona puede amar a Dios sobre todas las cosas, por el mismo, y amar al prójimo por a mor a Dios. Muchas veces caridad y generosidad van unidas, al estar muchas veces en almas bondadosas, pero no necesariamente son lo mismo.
Cerrar los ojos
Como nos decía el Padre Rafael García Herreros nosotros debemos cerrar los ojos para poder pensar y meditar sobre nuestra existencia, para meditar un rato ya que esto es una ascensión y una purificación. Cerrar los ojos nos ayuda a encontrar nuestra paz interior, estar un rato con Dios, endurecer nuestros afectos, orientarnos sobre nuestros deseos, ya que todas las cosas que las miremos con la luz de Dios son firmes y rotundas.
Sin un rato de silencio, todo sería confuso.
Un rato de silencio diario nos descubre el misterio que ocultan las cosas
La generosidad no siempre es caridad
Como nos decía el Padre Rafael García Herreros la generosidad
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