La historia de la empresa Сreaciones Greli

Juan Ocas soñó, de pequeño, que sería un gran empresario, conocido y muy aclamado por la gente. Un día decidió hacer realidad su sueño. Empezó a trabajar el cuero, abundante y de muy buena calidad en Trujillo, y luego fabricó casacas, carteras, bolsos, pantalones y hasta faldas. Hoy es uno de los vendedores de productos de cuero más reconocidos de Trujillo. Su empresa se llama Creaciones Greli.

Hace catorce años emprendió su negocio, junto con su esposa, una ingeniera química a quien idolatra. Al inicio solo curtían la lana, pero luego decidieron fabricar zapatos, casacas, sacos y otros productos. Hasta hoy continúan con la empresa familiar, donde además trabajan su suegra y hermanos. Algunos cosen, otros pintan, perfilan, etc.

Ellos, además, pertenecen a un consorcio que atiende decenas de pedidos. Aunque por el momento sus productos solo se venden en Trujillo, Ocas y compañía planean abrir más tiendas en otros departamentos del Perú. También sueñan con exportar sus productos, ser como el Gastón Acurio de los cueros.

La empresa la iniciaron con un crédito de Financiera Solución, hoy absorbida por el Banco de Crédito del Perú. Ese dinero lo invirtieron en materiales. Ya lo recuperaron. Ahora trabajan con dinero propio. Los precios de los insumos son un problema para ellos. “A veces suben de manera inexplicable. Pero allí estamos, dándole nomás”, cuenta Ocas.

Hace unos días los visitó unos comerciantes chilenos interesados en sus productos. Se han llevado algunas muestras de los cueros que trabajan. “Ojalá les agrade y nos compren harto”, comenta Ocas. “A los chilenos les gusta el cuero suave”, dice.

Antes de despedirse, les deja un mensaje a quienes recién empiezan: “Hay que tener mucha paciencia, los compradores vienen poco a poco. Hay que hacernos conocidos, luego los clientes nos recomendarán. Al cliente no se le puede engañar. Hay que ser honrados”, dice.

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