La planificación administrativa dentro de la organización.

“La planificación administrativa dentro de la organización”

Introducción:
La planificación administrativa es una herramienta de gran utilidad dentro de las empresas, sobre todo porque permite la elaboración de una guía a seguir, tomando en cuenta las dificultades a las cuales nos podemos enfrentar, diseñando por consiguiente sus probables soluciones.
La planificación determina el ciclo de acción y reacción de los diversos procesos; por lo mismo va indicando la secuencia de pasos que se deben de ir realizando.
La planeación, es básicamente una función del área administrativa y de Recursos Humanos, que pretende la eliminación de la incertidumbre y el cambio; manteniendo centrada la atención en el establecimiento de objetivos y el diseño de estrategias para lograrlos; pretendiendo así mismo, reducir lo más posible los costos de producción. 
Una buena planeación administrativa el control y dirección de la empresa, con gran flexibilidad y sincronización con los planes empresariales; y por lo mismo, toda planeación administrativa debe ser eficaz, estratégica y debe tomar en cuenta los costos y presupuestos con los que cuenta.

Desarrollo:
El proceso de planificación estratégica se lleva a cabo, tomando globalmente en cuenta, a toda la empresa, y es un proceso en el cual se toman en cuenta los índices de gestión, los presupuestos estratégicos, los análisis FODA, el análisis del portafolio de los productos, es durante este proceso que se declara la visión y la misión y se establecen los objetivos generales, creándose así, una cultura estratégica.

La planificación estratégica, se caracteriza por su flexibilidad, apertura y adaptabilidad a los cambios y planes de la organización en general. Como su nombre lo dice, se realiza un plan estratégico que indica, los objetivos específicos, de los objetivos generales; las estrategias de esos objetivos específicos, los responsables de llevarlos a cabo, tiempo en el que se deberán realizar y la inversión necesaria para que se lleven a cabo.

Dentro de la planificación administrativa esta la planeación salarial, proceso muy importante y delicado, que bien llevado a cabo puede reflejarse incluso en un personal más capacitado, en una disminución de rotación de personal, y en un incremento en la satisfacción del trabajador.

La planificación salarial, ayuda a definir el sueldo o salario apropiado para cada trabajador, y lleva a cabo un análisis y un diagnóstico para su establecimiento dependiendo su posicionamiento dentro de la empresa, comparándola con la posición que tiene dicho puesto en el mercado, y por consiguiente ayuda al desarrollo de políticas de compensación; tratando de hacerlo de la manera más equitativa y justa posible.

Hacer una planeación delas compensaciones, nos ayuda a hacer una buena definición y distribución de los incrementos salariales a todos los niveles, de las diversas compensaciones variables, de los bonos especiales, etc. Asegurándose de que cada empleado los reciba, en el momento y periodo que le corresponde, tomando en cuenta ciertos criterios previamente definidos, concordantes con las condiciones de mercado.

La planeación salarial, permite tener el control global de los costos por este medio y facilita por lo mismo su revisión, y comprensión, por los directivos y por los trabajadores, siendo cada parte consiente de la administración de su salario, clarificando las metas y objetivos a lograr. Y por ello se incrementa la satisfacción y la motivación de los empleados.

Con los planes salariales, se busca retribuir a todos los trabajadores de una empresa, la prestación de sus servicios a la misma, de manera equitativa y justa y para ello se toma en cuenta la administración de compensaciones. Se evalúa el desempeño de los trabajadores, compensando a quienes más se esfuerzan; por ejemplo a través de aumentos de sueldo; y estos aumentos deben estar previamente planificados, plasmados en una política de incrementos salariales. 
Se espera, que los incrementos salariales sean inversamente proporcionales a las percepciones de los trabajadores, lo cual equilibraría las finanzas empresariales, a través de una repartición justa de las riquezas.

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