Mi postura en el marketing
Enviado por katiaabril29 • 1 de Marzo de 2016 • Ensayo • 599 Palabras (3 Páginas) • 215 Visitas
[pic 1][pic 2][pic 3][pic 4]
Ensayo
Mi postura en el marketing
08/09/2010
ITESO
Katia Alejandra Valenzuela Valtierra
A lo largo del tiempo, el marketing ha recibido muchas acusaciones de crear campañas que perjudican al consumidor. No hablamos de todas las empresas, pero a la gran mayoría se les culpa de no usar correctamente el concepto de marketing y usar prácticas cuestionables y que terminan afectando a la sociedad.
Son varias y distintas críticas que se le hacen a marketing: precios altos, prácticas engañosas, ventas de alta presión, productos de mala calidad, etcétera.
Mi postura frente a esta discusión sobre si la mercadotecnia es inocente o culpable, se encuentra a la mitad. Para mí, tiene un poco de las dos.
Es cierto que muchas veces hay empresas que no son socialmente responsables y abusan de la ingenuidad de los consumidores. Siento que es culpable en algunas cosas como por ejemplo las prácticas engañosas. Muchas veces las empresas que no tienen ética ofrecen productos con las mil y una maravillas incluidas sólo para vender y en realidad terminan siendo productos de mala calidad o de los cuales sólo obtienen pocos beneficios. Como decíamos en clase: “Es bueno exagerar las cosas para poder vender mejor, siempre y cuando no lleguemos al grado de mentir”.
En mi opinión, somos un tanto culpables de vender productos de mala calidad o inseguros. Como consumidores, sabemos que algunas cosas son dañinas para nuestra salud (por ejemplo Mc Donalds) pero el efecto que tiene marketing en nosotros es tal que creemos que ese “deseo” es una “necesidad” cuando en realidad no lo es.
El sistema de mercado pone demasiado interés en los bienes materiales. A la gente se le juzga por lo que tiene y no por lo que es. Se hace mucha publicidad de lugares dónde se vende ropa, por ejemplo, como Palacio de Hierro. Gracias al marketing que nos crea una cuestión de falsos deseos, gastamos más en productos para posicionarnos en un status social, por el simple hecho de “querer pertenecer”. En vez de ir a comprar ropa a Walt-Mart, mejor vamos a Palacio de Hierro donde sabemos que supuestamente está la mejor ropa.
Claro que todo esto también es culpa de nosotros como consumidores. Dejamos que el marketing nos manipule muy fácil ya que no contamos con los conocimientos necesarios para no dejarnos llevar.
Es cierto que tampoco, como mercadólogos que llegaremos a ser, nos aprovechemos de esta falta de conocimiento de los consumidores. No existen empresas engañosas. Lo que existen son mercadólogos sin ética que por tal de vender, recurren a estrategias engañosas. Si esas personas fueran más responsables, estoy segura que, aunque no desapareciera, si disminuiría mucho todas esas prácticas engañosas.
...