PROTOCOLO – PRINCIPIOS DE LA ADMINISTRACIÓN CIENTÍFICA

Santiago de Cali, 7 de Agosto del 2019

PROTOCOLO – PRINCIPIOS DE LA ADMINISTRACIÓN CIENTÍFICA

A continuación yo, Isabella Gutiérrez Escobar, me permito presentarles el protocolo escrito donde se resumen las ideas más importantes de la obra científica y monografía escrita por el padre de la Ingeniería Industrial Frederick Winslow Taylor llamada: Principios de la administración científica escrita en el año 1911 en Estados Unidos de América. Éste mismo, viene a generar una mayor compresión de la propuesta del autor entre las páginas 5 y 108.

El escrito se desarrolla entre dos grandes capítulos; los fundamentos de la administración científica y los principios de la administración científica donde el autor nos presenta las siguientes ideas:

El autor en la introducción del mismo nos comparte una frase muy acertada para la época en la que él nació se estaban viviendo los problemas de la revolución industrial y cuando el presente fue escrito, ya estábamos en plena segunda etapa de la misma; es donde él toma consciencia de qué “en el futuro deberá comprenderse que nuestros jefes de industrias deben se instruidos correctamente, y que no hay hombre, por hábil que sea, que con el antiguo sistema de administración personal pueda tener la esperanza de competir con un número de hombre comunes, pero bien organizados y que sepan coordinar sus esfuerzos”, nuestro autor tenía pleno conocimiento que la industria y la administración de la misma debía tener un rumbo diferente y que iba a ser él el pionero e implementador de métodos científicos a los problemas de la administración para alcanzar la eficiencia, acabar con la cultura de qué la solución para darle fin a la ineficiencia y entrar en un entorno competitivo, era el buscar una administración sistemática de la empresa y no enfocarse en la búsqueda de hombres extraordinarios.

Nuevamente podemos observar cómo o hicimos en la anterior lectura, que hace más de un siglo nuestro autor dentro de los principios de la administración en la que quería tornar la industria en éste momento, piensa en la persona y en la cooperación que exige la relación entre el capataz y el obrero; nos regalan una obra científica, donde prima la sinergia entre la prosperidad del empleador y del empleado, la cual puede ser aplicada a todo nivel, en todo entorno, en nuestros hogares, nuestros lugares de trabajo, nuestros emprendimientos, instituciones, etc.

En el primer capítulo, el autor nos comparte dentro de su introducción a los principios; las diferentes variables de la productibilidad y que en conclusión la palabra prosperidad máxima solamente puede existir cómo el máximo de productibilidad. La armonización, cooperación, control empiezan a ser parte del desarrollo de este capítulo; frente a tres diferentes limitaciones mencionadas en el mismo, nos dan un plus para entender de qué forma aumentar la eficiencia en la administración de la industria; el aumento de salario, de demanda, de oportunidades laborales para la sociedad, mejores condiciones de vida. Al terminar de definir las tres limitaciones de la producción, inicia una breve descripción en la cual nos vende cómo lectores, la necesidad del estudio científico de las condiciones de trabajo, y el cómo, mediante estudios y análisis científicos del proceso podremos llegar al mejor método y la mejor herramienta; y a su vez, dejar a un lado los métodos empíricos o medidos porque el otro empleado lo hace de una forma diferente.

En el segundo capítulo iniciamos con instrucciones un poco más claras sobre los principios de la administración científica que nos da a conocer Taylor en su obra. Inicia con un breve análisis de la situación actual de la administración en ésta época, donde las iniciativas se esperaban de parte del colaborador y los líderes en su momento tenían en su mente que si no representaba un pago extra o incentivo especial, no iban a buscar una mejor forma de hacer su trabajo y la eficiencia anhelada en su momento. La administración científica versus la administración de iniciativa e incentivos genera una contrariedad especial entre ambas; sobre todo por la uniformidad del trato y la búsqueda de iniciativas sin incentivos. De allí parte a darnos explicación de los cuatro principios fundamentales de la administración que se basa en el desarrollo de métodos científicos para sustituir los métodos empíricos actualmente utilizados, de allí el segundo principio se basa en la correcta instrucción y entrenamiento, el tercer principio aplica los principios científicos en el proceso y da control sobre el mismo y en el cuarto y último principio se genera una distribución equitativa de las tareas y las responsabilidades entre la administración y los obreros. La disputa entre la administración científica y la de incentivos genera que la responsabilidad pase del obrero a los administradores del proceso; en el trascurso del libro, el autor nos permite conocer la solución de diferentes casos en los que se hizo la transición de estas dos administraciones, las diferentes variables presentadas y los diferentes experimentos en los que debió buscar la mejor forma científica de aumentar la productividad en el proceso, de los nodos en los que debía enfocarse para administrar basado en los cuatro principios r ir disminuyendo las limitaciones presentadas en el capítulo 1.

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