TECNOLOGIA DE LA INFORMACION, FACULTACION Y EQUIPOS AUTODIRIGIDOS

TECNOLOGIA DE LA INFORMACION, FACULTACION Y EQUIPOS AUTODIRIGIDOS

Una tendencia importante y acelerada, resultado de los avances en la Tecnología de la Información (TI), es el uso cada vez mayor de los trabajadores facultados, los equipos autodirigidos, los equipos intefuncionales, y los trabajadores temporales o contingentes. La TI está facilitando a los gerentes el diseño de una estructura eficaz en costos, y un sistema de control que les dé mucho más y mejor información sobre las actividades de los subalternos que evalué el desempeño funcional y que intervenga lo necesario para lograr mejor las metas organizacionales. La TI que proporciona una forma de estandarizar la conducta mediante el uso de una plataforma de software consistente y con frecuencia interfuncional, es un medio importante para controlar el comportamiento. Cuando los empleados o las funciones utilizan la misma plataforma de software para proporcionar información actualizada sobre sus actividades, se codifica y estandariza el conocimiento organizacional y facilita supervisar el progreso hacia las metas.

La TI brinda a las personas de todos los niveles de la jerarquía más de la información y el conocimiento que necesitan para llevar a cabo sus funciones de forma eficaz. Por ejemplo, los trabajadores son capaces de acceder de manera fácil a la información de otros trabajadores a través de sistemas de software interfuncional, que los mantenga informados acerca de los cambios en diseño del producto, en ingeniería, en programas de fabricación y en planes de marketing  que impactaran sus actividades de esta forma, la TI se basa y apoya la estructura de roles y tareas que por lo general se considera como la estructura organizacional “real”.

Así, el aumento en el uso de la TI ha favorecido una descentralización de la autoridad en las organizaciones y aun incremento en el uso de equipos, como se indicó con anterioridad, descentralizar la autoridad a empleados de menor nivel y asignarlos en equipos reduce la necesidad de la supervisión directa y personal por parte de los gerentes, y así las organizaciones se aplanan. El facultamiento es el proceso de dar a los empleados de todos los niveles de la jerarquía organizacional la autoridad para tomar decisiones importantes y responsabilizarse de sus resultados. Los equipos autodirigidos son grupos formales de trabajo, constituidos por personas cuya responsabilidad conjunta es garantizar que el equipo logre sus metas y que son facultados para guiarse a sí mismos. Los equipos interfuncionales son grupos formales de trabajo entrenados por empleados de todas las funciones de la organización,  que están facultados para dirigir y coordinar las actividades de creación de valor necesarias para realizar los programas o proyectos diferentes. El movimiento para planear las organizaciones facultando a los trabajadores ha ido en aumento desde la década de 1990 y ha tenido gran éxito de acuerdo con muchas historias de la prensa popular, sin embargo mientras algunos comentaristas predicen “el final de la jerarquía” y el surgimiento de nuevas formas organizacionales basadas tan solo en relaciones laterales, tanto dentro las funciones como  entre estas, otros no están tan seguros pues argumentan que incluso una organización plana, basada en equipos que se componen de trabajadores facultados, deben poseer una jerarquía y un mínimo de reglas y estándares de operación, si la organización quiere tener el control suficiente sobre sus actividades. Las organizaciones sacrifican las ventajas de la estructura burocrática únicamente bajo su riesgo, “El desafío de los gerentes consiste en combinar los mejores aspectos de ambos sistemas; de la estructura burocrática y de los grupos de trabajo facultados. En esencia lo que esto conlleva es que los gerentes deben cerciorarse de que tienen la mezcla correcta de estructura mecanicista y orgánica para enfrentar las contingencias que surjan. Los gerentes deberían usar los principios burocráticos para construir una estructura mecanicista y mejorar la capacidad de la organización para actuar de manera orgánica, mediante el facultamiento de los empleados y haciendo de los equipos la forma principal de aumentar el nivel de integración en una organización.

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