Análisis de la Pelicula Tenemos que Hablar de Kevin.

Al ver esta película surge una incógnita, ¿Es la condición sociópata de Kevin resultado del neurodeterminismo donde Kevin nace con un cerebro que le impide conseguir empatizar con los demás o sus actitudes son  el resultado de la falta de amor que desde el embarazo muestra la madre por su hijo? ¿Es la actitud de Kevin responsabilidad de sus padres o hay una condición diferente en el torno al córtex pre frontalventromedial y las diferencias en su amígdala las que impiden que pueda tener sentimientos como empatía, culpa y miedo?

Los recuerdos de Eva antes del embarazo, son de una mujer libre, independiente, que se siente enamorada de su pareja, sin embargo desde el embarazo se evidencia una frustración en ella, quizás un temor al ponerle fin a sus aventuras y su libertad. Por otra parte Frankling, su esposo, se muestra como un padre accesible, pero poco colaborar con los quehaceres.

Durante el desarrollo de la película, Kevin se muestra como un niño difícil, un niño que siente rechazo por su madre, una madre que inicialmente le rechazó. De acuerdo con Freud, la relación entre el hijo y la madre, especialmente en los primero años, determina el futuro de una persona. La madre siempre es la amante universal, la persona a través de la que el niño logra aprender y desarrollar la capacidad de amar, de sentir empatía.

Desde los primeros meses Kevin muestra dificultades para conciliar el sueño, se muestra irritado, tiene dificultades con el control de esfínter, siendo un niño un poco mayor presenta encopresis, que visto desde un punto psicoanalítico, puede ser una manera de reclamar el amor que no recibe de parte de su madre. Además presenta poca tonicidad muscular. Por otra parte, a nivel conductual es un niño con actitudes oposicionistas y de rechazo hacia su mamá, se muestra además como un niño agresivo y no se evidencia que se relacione con otros niños.

A partir de esta recolección de información, haremos un análisis evaluando a Kevin desde la teria de la personalidad de Donald Winnicott. Para este durante el primer años de vida el niño no se concibe a sí mismo como una persona, una unidad, sino que este se considera parte de su madre. La madre es el primer entorno del infante, especialmente por la práctica de la lactancia. El rol del padre es regulado por la madre, colaborando más con sentimientos de seguridad y el sentirse acompañada.

Después de unos meses, se inicia un proceso donde el bebé a través de objetos transicionales va separándose de la madre lentamente, y comprendiéndose a sí mismo como un ser independiente. Winnicott considera que el Self es el aspecto singular de cada ser humano, lo original de cada uno y lo más auténtico, un proceso adecuado de relación madre-hijo permite que el niño haga un vínculo entre la psique y lo somático, sin embargo cuando en los primeros meses  la madre no se adapta a las necesidades psíquicas del niño, este busca una manera de sobrevivir protegiendo su self a partir de un falso self, dando como resultado una ausencia de fe, confianza, capacidad de crear e ilusión en el niño.

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