Comenzare por una breve biografía de Georg Groddeck,

Comenzare por una breve biografía de Georg Groddeck, después mencionare aspectos relevantes de su vida, de los cuales iré haciendo un análisis, relacionándolos con la teoría psicoanalítica.  

Georg Groddeck nació el 13 de octubre de 1866, es conocido como el padre de la medicina psicosomática. La palabra psicosomática viene de mente (psique) y cuerpo (soma). Es así que se califica como psicosomático al trastorno psicológico que genera un efecto físico, provocando alguna consecuencia en el organismo. Puede decirse, por lo tanto, que una afección psicosomática se origina en la psiquis y después ejerce una cierta influencia en el cuerpo.

Su madre se llamaba Caroline Groddeck, y su padre Karl Groddeck. Tenía una hermana llamada Lina, quien estaba enferma y otros tres hermanos mayores que él (Karl, Hans y Wolf).

Su padre era médico, y considero que esta cuestión influyo en que él estudiara medicina. Algo que me parece importante rescatar es que su madre no era cariñosa con él, ella tomaba el papel de la cabeza del hogar, era muy estricta y demandante con todos sus hijos, pero en especial con Groddeck.

Al nacer Groddeck, su madre decidió no amamantarlo, de vez en cuando lo hacia una nodriza. Rescato esto porque en el psicoanálisis, en la teoría de la frustración de Winnicot, se hace referencia sobre el destete, y al respecto se menciona que para que un niño avance en su desarrollo es necesario frustrarle, hacerle salir del principio del placer y acceder al principio de realidad. Groddeck desde muy pequeño su nivel de desarrollo era superior al de un niño de su edad.

Asimismo, es importante destacar que en la teoría psicoanalítica, también se menciona que el bebé satisface su primera necesidad, de alimentación, a través de la boca y el contacto con el pecho materno. Posteriormente la acción de mamar se convierte en el chupeteo (acción de succionar que no tiene por fin la nutrición) donde la acción se deslinda de la nutrición y busca la plena satisfacción, mediante un circuito de autoerotismo.
La cultura y las propias limitaciones del cuerpo exigen que el pecho materno se aleje del bebé; esta ausencia provoca el primer sentimiento displacentero.

Al comenzar Groddeck con sus estudios tuvo que separarse de su familia. A pesar de la poca relación que siempre llevo con su madre, él menciona que la separación con ella le produjo sufrimiento. Es normal que Groddeck sufriera ante la separación con su madre, es común que algunos niños muestren una reacción excesiva ante la mera idea de quedarse solos. Algunos autores pueden llamar a esto, trastorno de ansiedad por separación. Este trastorno se ubica al inicio de la infancia y se caracteriza por una excesiva preocupación por alejarse o separarse del hogar. Tanto así que cuando ya era inevitable su partida, se comenzó a sentir enfermo. Era una enfermedad real, es decir, había síntomas y signos, además de las quejas subjetivas. La causa no pudo determinarse y el diagnostico permaneció indefinido, sin embargo, los médicos lo llamaron “fiebre nerviosa”.  

A pesar de todas sus dolencias tuvo que partir a hacia Pforte donde estudiaría. Su estancia allá fue difícil. Parecía no poder dejar de hacer lo que estaba prohibido. Rompía las reglas de una manera desafiante. Todo esto le produjo consecuencias, como el aislamiento, ganándose el título de “rey de la cárcel”. Después de ser un magnifico estudiante se convirtió en uno mediocre. Cabe destacar que su comportamiento en su casa era totalmente diferente, las vacaciones lo llenaban de felicidad.

La relación que Groddeck tenía con su padre era buena, inclusive lo acompañaba en sus visitas de médico a domicilio. Un aspecto importante que me gustaría resaltar es que el Dr. Karl Groddeck no respetaba las tradiciones médicas. Pensaba que había demasiada “prestidigitación” en la medicina, demasiado cumplimiento de las técnicas establecidas, muy poca investigación. Por ello adoptaba cada tratamiento a las necesidades del paciente.

Al enfermar el Dr. Karl, Georg creyó que controlaba el síntoma durante varias horas de la enfermedad. Cuando la respiración daba las primeras señales de alteración, si ponía su pulgar en el espacio entre los dos músculos de la nuca presionando las vértebras, la respiración volvía a hacerse normal. Sin embargo, su observación era defectuosa, fijándose en él la idea de que era una especie de médico milagroso. A esta idea, a esta Fe ilimitada en sus facultades de curación, atribuyo gran parte de su éxito.

A la muerte de su padre, Groddeck experimentó un sentimiento de cólera, dejando en él una terrible sensación de haber sido abandonado por su padre. Aunado a lo anterior, Sigmund  Freud menciona que el dolor de duelo proviene de la pérdida del objeto querido porque la persona querida hacía parte del propio yo (sujeto).  

En 1889 se graduó Georg Groddeck de la Universidad como médico. El 20 de septiembre de 1892 su madre murió, reflejando en él un sentimiento de culpa. Escribió al respecto:

“cualquiera que pertenezca a nuestra sociedad civilizada y cuyo padre haya muerto, cree que es culpable de su muerte, lo cree inclusive cuando la madre ha muerto lejos de él.”(Grossman & Grossman, el psicoanalista profano, pp 32).

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