Cuadro de subjetividades

Subjetividad- Instituciones

Nosotros nos constituimos como sujetos a partir de la mirada del otro. El sujeto del psicoanálisis, es un sujeto evanescente. Su constitución está alienada en función de Otro y del lenguaje –que le preexisten- lo marcan de una manera y no de otra, distinta en cada sujeto pero, como a todos, incompleta y deseante. El niño construye la imagen de su cuerpo en función de una temprana experiencia que Lacan denomina fase del espejo. En ella se juega el ser visto/mirado desde afuera por los otros significativos que lo rodean, fundamentalmente la madre, el padre, en donde esos ojos-otros tienen una equivalencia analógica con el espejo que refleja su imagen.

Si pensamos, grosso modo, en la propia constitución, tendríamos que pensar en ese feto, que se convertirá en un ser social, si, primeramente, ha sido deseado o no. Al nacer, el bebé ingresa en la dramática familiar, esto es, su crianza en un determinado núcleo familiar. Allí será provisto de las primeras marcas o huellas que quedarán como inscripciones en su inconsciente. La propia capacidad deseante del sujeto queda condicionada según qué respondan los adultos a las preguntas del niño.

La capacidad de pensar no surge en la escuela ni se circunscribe a los aprendizajes escolares sino que tiene su origen en la calidad de las relaciones primarias. De todas formas, es en la escuela donde se juega una oportunidad para transformarla y potenciarla. La familia es, desde el nacimiento y por un lapso fundamental en su desarrollo, el único espacio virtual del que el niño extrae los fundamentos que lo acompañarán a lo largo de su vida. El permiso para la curiosidad y la duda de la palabra por parte de los adultos es el inicio de un proceso de diferenciación y autonomía, de ingreso al espacio social. No todas las familias facilitan ese pasaje. El espacio social es el que otorga la oportunidad de pensar de otra manera. El grupo, en este sentido, es un lugar de complementación narcisística y revalorización del origen, en el interior de cual se juega una oportunidad para la reformulación del pasado. La subjetividad es la posibilidad que tiene un sujeto de crear al otro, al mundo y a sí mismo. La condición y el marco para la producción de subjetividades están dados por el intercambio social, y también están dados estructuralmente. Para un sujeto es imposible no producir subjetividad.

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