EL EMBARAZO EN ADOLESCENTES NO DEBE SER EL RESULTADO DE LA PROBLEMÁTICA SOCIAL

EL EMBARAZO EN ADOLESCENTES NO DEBE SER EL RESULTADO DE LA PROBLEMÁTICA SOCIAL

A través de la historia, el embarazo en adolescentes ha sido una problemática que ha desarrollado bastante análisis en los factores que influyen para que suceda este fenómeno, que en algunas décadas por cuestión de tradición y por costumbre regionalizada, ha mantenido altos índices de natalidad en los jóvenes, pero que con el transcurrir del tiempo estos acontecimientos han dejado de ser una costumbre y se ha convertido en un tema de atención tanto en países desarrollados como subdesarrollados.

Si bien es cierto, el embarazo en la adolescencia es un fenómeno que tiene importantes implicaciones en los ámbitos; personal y social, los cuales Amaya, Borrero y Ucrós (2005) afirman que el embarazo en esta edad es uno de los problemas más relevantes en salud reproductiva en el mundo; se ha calculado que alrededor de 15 millones de adolescentes dan a luz cada año. Desde este punto de vista en ciudades como Bogotá la educación sexual que hoy se imparten en los colegios sobre todo del sector público, al parecer no está cumpliendo su función informativa y formativa, Flórez (2005) plantea que vivir en una ciudad grande, como Bogotá, conlleva una mayor probabilidad de iniciar más temprano las relaciones sexuales, en comparación con las regiones rurales o las ciudades de tamaño intermedio.

Ahora bien, los factores socioeconómicos influyen en el inicio precoz de la vida sexual, además de las consecuencias de ser madre a temprana edad, Salazar, Acosta, Lozano y Quintero (2008) dicen que las madres adolescentes tienen que tener en cuenta que la responsabilidad que están asumiendo al tener un hijo es un reto grande y difícil, sin dejar a un lado el riesgo a nivel de salud, ya que las adolescentes en embarazo son consideradas como un grupo de alto riesgo, tanto física como psicológicamente, Gázquez (2008), expone los estudios realizados a nivel mundial, en Colombia y en la ciudad asocian el embarazo adolescente con estas causas: factores estructurales, como las condiciones de vida pueden tener una implicación negativa en la situación de los jóvenes, particularmente porque la incidencia de la pobreza; factores individuales, como la búsqueda de reconocimiento, afirmación social y de afectividad por la vía de la maternidad, personalidades dependientes de la aprobación masculina que presiona en la sexualidad temprana, el embarazo y la maternidad; y factores institucionales, como déficit en los servicios específicos de atención en consejería sobre salud sexual y reproductiva; prevención para la población adolescente incluida la anticoncepción, educación sexual y falta de promoción sobre los derechos sexuales y reproductivos.

Por lo anterior, la sexualidad y la adolescencia son dos conceptos que juntos, en nuestra sociedad y ámbito de la salud ocasionan inquietud por los riesgos que se tienen: embarazo no planificado, enfermedades de transmisión sexual, además de las críticas morales, por lo que Noguera y Alvarado (2012) describe que el inicio precoz de la actividad sexual en adolescentes y jóvenes está asociada a la pobre planificación familiar y riesgo de adquisición de enfermedades de tal tipo, poniendo en riesgo así la salud. Es por esto, por lo que se considera importante abordar este tema para así crear conciencia en los adolescentes entre 14 a 16 años acerca de los embarazos a temprana edad, por medio estrategias que ayuden a reducir de manera significativa esto que ocurre en la población adolescente.  

Sin embargo, hablando de lo general a lo particular se puede ver que en Colombia de acuerdo a la última Encuesta Nacional de Demografía y Salud 2015 (ENDS), el indicador más alto por la razón de abandono escolar en las mujeres es por haber quedado embarazadas, con un porcentaje de 6.9% después de abandono por falta de recurso económicos con un 7.3%; por ende se puede analizar que aparte de unas consecuencias en la salud de las adolescentes, el embarazo también influye en la educación de aquellos que por decisión o por accidente se convirtieron en padres  a temprana edad.

Por consiguiente, si se habla un poco más focalizado del tema y se enfoca sobre Colombia y más específicamente sobre Bogotá, se encuentra que hay un alto índice de embarazos a temprana edad, hablamos de edades menores a los 16 años, ocupando la localidad de Santa Fe uno de los primeros puestos en esta problemática y más exactamente en la unidad de planeamiento zonal de la Cruces y orientado sobre el barrio San Bernardo, que por décadas ha sido golpeado fuertemente por los diferentes factores de inestabilidad. Es aquí donde se encuentra ubicado el I.E.D Colegio Antonio José Úribe, donde

Se puede entrar a hacer un estudio de área donde por medio de estadísticas se puede comprobar que es notablemente afectado por la problemática anteriormente expuesta “embarazo en adolescentes”.

Antes que todo, no solo los factores o consecuencias anteriormente tratados son de recalcar, es importante hablar también que este fenómeno en la adolescencia se convierte según Flórez (2015) “en un problema de salud pública cuando a partir de 1990 se detecta su tendencia sistemáticamente creciente que encuentra el valor máximo en 2005; el descenso empieza a partir de 2010 como lo confirman los hallazgos de la ENDS 2015. El porcentaje de adolescentes, de 15 a 19 años, madres o embarazadas del primer hijo o hija aumenta de 12.8 por ciento en 1990 a 20.5 por ciento en 2005, para luego disminuir a 19.5 por ciento en 2010 y a 17.4 por ciento en 2015”. No obstante, a que en el último informe reduce el porcentaje de natalidad en los adolescentes, sigue siendo un índice alto en Colombia.

Por tal motivo, se puede pensar que las estrategias que se han desarrollado en el país no han sido tan efectivas, tampoco se puede negar que se ha hecho un buen trabajo en el ambiente escolar con campañas de prevención principalmente dirigido a charlas de prevención de embarazo y del uso de métodos anticonceptivos. Pero se podría llegar a pensar que no se ha realizado un análisis permanente del método en que ese adolescente recepciona mejor los mensajes que se quieren dar con estas estrategias, es decir, que puede haber múltiples trabajos dirigidos a la prevención de embarazos a temprana edad y a los derechos de la reproducción sexual pero tal vez el sistema formativo o informativo no es el más adecuado para este tipo de población en el que se centra la problemática en el país.

Aunque, si se es un poco más realista sobre este tema, el estado colombiano puede diseñar miles de estrategias con todos los recursos que se quieran para llevar a cabo la ejecución de estas, pero si lo anterior no va acompañado con el trabajo de educación que se hace en los colegios y así mismo desde casa, difícilmente se podrá obtener un resultado que haya impactado contundentemente este factor.

De lo anterior, se puede deducir que van saliendo cada vez más y más factores que influyen en que una adolescente entre la edad de 14 a 16 años quede en estado de embarazo, pero como en este trabajo lo que se quiere es focalizar en determinado espacio, es necesario mirar las principales causas que alteran el pensamiento en el joven que vive en el barrio San Bernardo y estudia en el I.E.D. Colegio Antonio José Úribe. Este sector puede entenderse como una de las localidades donde más factores de inestabilidad de la ciudad de Bogotá se puede encontrar, debido a que, así como es en donde se encuentra los lugares donde se toman las decisiones del país, cuenta con varias universidades importantes, diversos lugares culturas, espacios históricos de relevancia del país y además con espacios de gran magnitud de negocios y locales de la ciudad, también se puede pasar a la parte que no se quisiera mostrar, como lo es la prostitución, se podría decir que en el centro de Bogotá es el lugar donde más establecimientos para este tipo de diversión existe.

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