Ensayo - Maltrato infantil

Universidad de Puerto Rico

Recinto de Río Piedras

Escuela Secundaria

Ensayo

Derek J. Terrón Molina

2019 – 093

Prof. Rumar

        Cuando hablamos de cualquier acto por acción u omisión realizado por individuos, instituciones o por la sociedad en el cual se prive a los niños de sus derechos, se dificulta su óptimo desarrollo o se atente contra su libertad y la calidad de vida que merecen vivir, estamos hablando del maltrato infantil.  Lo triste es que a pesar de las “leyes” y las “gestiones” que “hacen” todas las “instituciones” que componen la sociedad, este mal sigue aumentando brutalmente en nuestra isla.  En el 2013 se probaron 5,157 casos y en el 2014 hubo un alza de un 11%.  Si se toma en cuenta que por cada caso que se reporta hay otros dos que no son denunciados se puede estimar que la cifra real de niños maltratados en Puerto Rico para el 2014 fue de 15,500.  Otros estudios recientes proyectan que una de cada tres niñas y uno de cada siete varones serán abusados en algún momento de su niñez.  Estas estadísticas son alarmantes y en mi carácter personal me llenan de mucha preocupación, me obligan y a plantearme lo siguiente: ¿Qué vamos a hacer para detener este crecimiento?  Comenzaré explicando los tipos de maltrato infantil, cómo podemos detectarlo en las víctimas y en los maltratantes, indicadores, las causas, las consecuencias Y finalmente qué haríamos para detener dicho aumento.

        Es importante clasificar los casos de maltrato infantil para poder investigar Y fijar responsabilidades así como dar las ayudas necesarias a las víctimas. Entre los tipos de maltrato infantil tenemos el maltrato físico como uno de los que ha aumentado considerablemente.  Este incluye golpes con quemaduras, mordidas y mutilaciones entre otros. Le sigue la negligencia y el abuso sexual. La negligencia es la categoría más grande ya que incluyen desde no alimentar al menor hasta dejarlo solo. El abuso sexual también ha tenido un aumento considerable en sus casos ya que en este tipo específico por cada caso reportado al cinco que no se reportan. Muchas veces las víctimas no lo denuncian por miedo a represalias, por vergüenza, o porque su familia no se rompa. Tratan de resolver la situación por sí mismos. Otro tipo de maltrato es emocional incluye insultos, rechazo, amenazas, burlas, humillaciones, desprecio, críticas negativas constantes, aislamiento, atemorización y otras conductas del padre, madre, cuidador, maestro, etc.  que pueda causar daño al desarrollo emocional, social o intelectual del niño. También cae en esta clasificación la falta de afecto, apoyo, estimulación y protección por parte del  adulto. Añadimos en la explotación de menores y el maltrato institucional como tipos de maltrato. Este último ha adquirido mucha importancia pues se relaciona con todos los procedimientos, actuaciones o comisiones de los poderes públicos como salud, seguridad y otros que violen sus derechos.

        Ahora bien; ¿cuáles son los indicadores de que un menor está siendo maltratado?  Debemos estar atentos a la presencia de marcas en su cuerpo de golpes, quemaduras, pobre higiene, cansancio, sueño, cambios de conducta, hostilidad, conducta sexual no apropiada para su edad, pobre trabajo escolar, comer mucho o muy poco, ausencias frecuentes al escuela, depresión, relaciones secretas con adultos, falta de cuidados médicos y hasta intentos de suicidio.  El adulto maltratante que también tiene indicadores. No se preocupan por el menor, no van a citas de la escuela, ven a su hijo como una propiedad, los premian con cosas materiales, a veces son usuarios de drogas o alcohol y tiene un trato desigual hacia los hijos.

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