Precencion consumo cannabis

26 DE ENERO DE 2015

Esta carta no va dirigida a alguien en especial, es para ti que estás leyendo estas líneas tal vez sin sentido, pero espero que puedas ver más  allá y entender lo que quiero decirte, esta es mi historia.

Mi nombre es Liliana Velásquez, tengo 20 años estoy en un centro de rehabilitación para adictos a drogas estoy aquí hace 2 años no puedo expresar en palabras lo difícil que ha sido mi vida desde que tenía 12 años, yo era una pequeña que empezaba a vivir, tenía sueños y expectativas, esperanzas metas y objetivos para la vida, la diferencia entre tú y yo, es que yo tome una mala decisión cuando era muy joven, esto me llevo a que mi vida se convirtiera en un caos y en el infierno que estoy. Cuando tenía 12 años cursaba el grado séptimo, tenía un grupo de amigos nos gustaba salir a fiestas y ese tipo de cosas, recuerdo el día que empezó el caos, en una de esas fiestas un desconocido se nos acercó y nos ofreció marihuana para que según él la pasáramos bien, mi mejor amiga compro $5.000 ahí empezó mi infierno, desde que la probé comencé a consumir frecuentemente, en el colegio, en la casa, fue pasando tiempo y ya no pasaba un día sin consumir, empecé a consumir cosas más fuertes que me sacaran de la realidad, yo no tenía idea de lo que estaba metiendo, esta situación ya ocupaba todo el tiempo de mi vida. Nunca nadie me instruyo acerca de la marihuana ni de sus componentes, así que supuse que era buena pero fue la puerta para mi perdición. Hoy en día me arrepiento de haber tomado la decisión de consumir, la presión que tenía era muy grande, porque muchos de mis amigos fumaban y yo no me quería sentir excluida y encajar, además era muy sencillo conseguir la marihuana, con gente del colegio o del barrio y todo lo demás que quisiera. Al momento de consumir no pensaba en mi familia, ignorando que a ellos realmente les importaba porque querían lo mejor para mí, mi actitud cambio ante ellos, mis notas bajaron, todo mi cuerpo se desequilibró totalmente. En un  momento mi familia me dio la espalda, no sabían que hacer conmigo, me echaron de la casa porque ya no podían más conmigo, no quisieron afrontar la realidad. Yo quería estudiar diseño gráfico y tener una familia pero no logre ninguno de mis objetivos porque no termine el colegio y me alejo me mis metas. Me acuerdo de una tarde que estaba en un parque y esa sensación de pesadez, l lentitud con la que pasaba el tiempo, la forma de percibir las cosas estando fumada, ya era normal para mí. Un joven se me acerco a hablarme me dijo que si estaba bien, le dije mi nombre y caí profundamente dormida, cuando desperté el joven estaba a mi lado ahí me di cuenta que era uno de mis compañeros de colegio y me dijo que tenía una fundación para personas adictas, que allá me podrían ayudar a salir de esta, reflexione y pensé en todo en ese momento, pensé en mi familia y con una fuerza de voluntad que llego a mí, decidí ir a la fundación. Hoy cumplo dos años en rehabilitación, a sido un proceso muy complicado. Aquí me enseñaron lo que es la marihuana, los componentes, lo que causa en mi cuerpo, en mi sistema nervioso, y en el equilibrio de todo cuerpo. Ahora sé que la cannabis tiene más de 400 componentes químicos, y que algunos de estos tiene altas propiedades psicoactivas, y por eso es usado como droga. Estos componentes activan los receptores del cerebro y se producen reacciones específicos en el cuerpo, como los efectos que tienen sobre la memoria, las funciones motoras, las formas de percibir las cosas. Realmente quiero superar esta etapa y salir adelante, y cumplir todos mis proyectos de vida

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