¿Pueden cambiar las personas?

[pic 1]

INSTITUTO MEXICANO DE PSICOONCOLOGÍA

PLANTEL MONTEVIDEO

¿PUEDEN CAMBIAR LAS PERSONAS?

RESÚMEN

Presenta:

MARCO OCTAVIO GARCÍA RODRÍGUEZ

Docente.  

        JUAN CARLOS MORENO SÁNCHEZ

 CDMX LUNES 13 DE JULIO DE 2020.

El presente resumen tiene por objeto describir mi opinión sobre el polémico tema: ¿Pueden cambiar las personas?”

RESUMEN

Comenzaré haciendo alusión a algo que menciona Ramón Nogueras: “la psicología popular tiene muy poco que ver con la psicología científica”. El grueso de la gente piensa que para cambiar hace falta una gran fuerta de voluntad y por ello la gente trata de generar un cambio a partir de una lucha interna que le llevará seguramente al fracaso.

El psicólogo Roy Baumeister aportó la teoría del agotamiento del ego. Según esta teoría, cuando una persona sufre un desgaste de energía mental muy intenso y/o prorrogado en el tiempo, se pierde capacidad de autorregulación durante un período temporal. Es decir, que la persona no es capaz de controlar totalmente sus emociones, sus impulsos y por ende su conducta, ya que capacidades tan importantes como la culpa, la asertividad y la empatía se ven realmente afectadas. El tomar decisiones difíciles implica que nos vayamos quedando sin voluntad y es por ello que siempre hemos de regresar al punto de partida, entiéndase que al final del día nos queda nula energía para continuar con el supuesto cambio.

El problema con este modelo es que no se toma en cuenta el CONTEXTO; el ser humano reaaciona a las señales que nuestro contexto nos envía, así que debemos entender que la mayoría de las decisiones que tomamos no tienen nada de racionales y aquí cabe a pregunta: ¿por qué el cambio es tan difícil?

Nuestro cerebro genera de 60,000 a 70,000 pensamientos al día y el 90 % de ellos son los mismo que los del día anterior y es por esto que nuestra vida a futuro no cambia mucho, por lo que vamos de los mismos pensamientos a las mismas elecciones, luego a las mismas acciones y comportamientos y posteriormente a experimentar los mismos sentimientos, para que una vez más regresemos a los mismos pensamientos y así, el ciclo se repite.   [pic 2]

La ley de Hebb postula que las células nerviosas que se disparan juntas se unen, y es lógico que se haya programado al cerebro en un patrón finito que tiene los mismos sentimientos y emociones producidos en los últimos 10 años y, aunque la identidad o personalidad se concreta a los 35 años, para ese entonces la identidad del individuo es un cúmulo de comportamentos memorizados.

Cuando una persona decide cambiar, estará creando pensamientos positivos con el restante 5% de su mente consciente, pero ello nunca pasará del tallo cerebral al cuerpo ya que éste está condicionado por el pasado, volviéndose predecible. “La gente al despertar no piensa en nada, pero enseguida comienzan a llegar los pensamientos que son sólo recuerdos y por lo tanto, siguen pensando en el pasado: mientras sigas pensando en tu pasado, tu pasado siempre será tu futuro”.

...