Taller de percepción auditiva, inventario de capacidad auditiva

Taller de percepción auditiva, inventario de capacidad auditiva

Anggie Paola Cruel Velasco

Fernanda Ocampo

Karen Gonzales

Natalia Velásquez

Aida Ingrith Martínez Barreto

Universidad Cooperativa de Colombia

Facultad de Psicología

Sede, Villavicencio

2019

1. ¿Cuáles son los tipos principales de perdida de la capacidad auditiva permanente?

Perdidas auditivas de conducción y neurosensorial

     Los dos principales tipos de pérdida auditiva son la perdida de la conducción auditiva y la perdida de neurosensorial de la audición. Ambos tipos de pérdida auditiva pueden evaluarse con ayuda de un audiómetro que ofrece una representación gráfica de la pérdida auditiva llamada audiograma.

     La pérdida de la conducción auditiva: se deriva de deficiencias en el mecanismo de conducción del aparato auditivo, sobre todo el que se relaciona con la estructura y el funcionamiento del conducto auditivo externo, el tímpano o los osículos.  

Trastornos del oído externo

El conducto auditivo se puede obstruir por la acumulación excesiva de cerumen (cerilla) o por la inserción de objetos, como cuando los niños se introducen frijoles o bolitas de papel en las orejas porque les parece divertido.  

• Los niños nacen con malformaciones en el oído externo medio presentan un problema más grave ya que estas impiden que el sonido viaje a través del conducto auditivo hacia el oído medio.
• Las obstrucciones también se deben a la inflamación del canal a causa de infecciones   producidas por microorganismos, situación que con frecuencia sufren los  nadadores debido a que el agua se queda atrapada en el conducto.
• Otro problema se presenta cuando la membrana del tímpano al final de oído externo se revienta debido a un ruido muy fuerte, permitiendo el paso de microorganismos aquí oído medio, lo cual puede generar una infección.

Trastornos del oído medio

• La otitis media, es una infección en el oído medio estas se deben a baterías que inflaman la trompa de Eustaquio, es decir, la vía que va del oído medio a la faringe, con el tiempo el crecimiento bacteriano genera fluidos que impiden la vibración adecuada del tímpano y de los huesecillos.  
• La recepción constante de infecciones puede causar una acumulación de tejido llamada colesteatoma que interfiere con la vibración del tímpano y los huesecillos y debe retirarse por medio de cirugía. Si estas infecciones se propagan al mastoideo debe tratarse in mediatamente antes de que la infección llegue al cerebro.
• La otosclerosis es una condición hereditaria en la que hay una excreción ósea en el oído medio. El estribo queda fijo en su sitio, de modo que no transmite vibraciones al oído interno.

     La pérdida neurosensorial de la audición: ocurre por diferencias en el nervio auditivo o daño en el mismo, a estructuras en el órgano de Corti u otras conexiones neuronales estrechamente ligadas en la cóclea.

• La sordera se traduce en niveles de umbral auditivo para la percepción del habla por debajo de los 92dB (Davis, Silverman 1978). A estos niveles, la comunicación auditiva normal es casi imposible. En comparación, la pérdida auditiva es una merma mesurable de sensibilidad que no impide la comunicación auditiva. Según una estimación de (Davis, 1988; Steel, 1998), cerca de 16% de los adultos tienen una pérdida auditiva clínicamente significativa (que se define como un detrimento de 25 dB o más).
• Presbiacusia El avance de la edad es, con mucho, la causa más común de deficiencias auditivas del oído interno y, directamente, es probable que sea la principal causa de todas las pérdidas auditivas (que representan más de 40% de todos los deterioros auditivos). En un estudio reciente sobre sobre una población anciana (edad promedio de 66 años), la frecuencia de perdidas auditivas (mayores a 25 dB) fue casi de 46% y las probabilidades de pérdida auditiva aumentaban con la edad (Cruickshanks, 1998).

     Muchos de estos efectos se dan debido directamente con la edad y desempeñan un papel importante en el progreso de la pérdida auditiva: diversas formas de deterioro del oído medio, pérdida de elasticidad de la membrana basilar, restricción de flujo vascular a las estructuras auditivas y de generación gradual y pérdida de elementos sensorio-neuronales en el oído interno.

     De igual manera aunque el envejecimiento esté relacionado directamente con la perdida  auditivas también existen otros factores que pueden estar implicados de manera significativa en los efectos de la pérdida auditiva como por ejemplo la influencia acumulada de infecciones y la exposición ocasional a ruido anormal, los cuales pueden afectar las relaciones sociales e los individuos y contribuir a una psicopatología.

• Perdida de la audición inducida por el ruido ocurre cuando los sonidos fuertes degeneran las células ciliadas. Esta degeneración se ha observado mucho en personas que trabajan en medio ruidosos o que se exponen mucho tiempo a un volumen elevado de música.
• De igual forma el trauma acústico es causado por estruendos, como las explosiones o las máquinas de impacto sonoro, origina perdidas sensorioneuronales de la audición.
• Tinnitus afecta a decenas de millones de personas, algunas de ellas de forma grave, la causa común es la exposición a ruidos fuertes, aunque también es producto de ciertos fármacos, infecciones del oído y alergias alimenticias.
• Enfermedad de Meniere, es una condición impactante debido a la acumulación excesiva del líquido que llena la cóclea o los conductos semicirculares. Los síntomas son la pérdida auditiva fluctuante, Tinnitus y vértigo agudo, con frecuencia acompañado de náuseas y vomito.
• Pérdida neuronal del oído, es causada por tumores en el nervio auditivo a lo largo de las vías del tallo cerebral. En general estos tumores crecen lentamente y son benignos, sin embargo cuando se retiran por medio de cirugía dejan muchas veces al paciente con cierta sordera.

1. ¿Cuáles son las causas asociadas comúnmente a dichos factores?

• Enfermedad, lesión o fármacos

     La pérdida auditiva y la sordera se deben a diversas condiciones y exposiciones ambientales, lo que incluye infección crónica del oído medio e interno, exposición intrauterina al virus rubeola, neuroma acústico, exposición prolongada a ruido intenso y el efecto de algunos antibióticos en el sistema auditivo.

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