Actividad 13 De Profesionalizacion Docente
Enviado por kyuu • 29 de Mayo de 2013 • 2.499 Palabras (10 Páginas) • 496 Visitas
NACIONALISMO E IDEOLOGÍA DOMINANTE: EL MARCO SOCIOHISTÓRICO
El nacionalismo actúa en las sociedades como un elemento del modelo cultural, México que ha sufrido la intromisión de potencias económicas mundiales en todas las decisiones y movilizaciones, que afectan los intereses o la seguridad.
El nacionalismo constituye las relaciones sociales, movilizaciones, decisiones, desarrollo y modernización. Actúa como frontera en el plano de la sociedad global, la cual si es rebasada o amenazada, la respuesta debe de ser enérgica, generando la unificación y movilización de todos los sectores contra el enemigo nacional. Aplazando por lo general los conflictos internos.
Cuando la amenaza exterior no es abierta y se encuentra en unión con algunas clases o fracciones internas, que son beneficiarios directos de dicha intervención se refleja en la descomposición del modelo cultural, de los intereses y de la ideología de la clase dominante.
La movilización para el desarrollo nacional en contra de los intereses de las grandes potencias económicas, o bien, el llamado nacionalismo–desarrollismo, pierde sentido ante la desnacionalización y la apropiación de los capitales extranjeros en nuestra economía y genera una crisis del modelo cultural basado en esta combinación.
El intento de la organización social puede verse afectada porque no es fácil conciliar y reorientar esta contradicción o la no correspondencia entre el nacionalismo y la intervención extranjera.
La unidad nacional, sigue siendo alimentada en los términos tradicionales, siendo la base o la esencia del modelo cultural de nuestra sociedad, en México dejo atrás el nacionalismo aristocrático, integrado por intelectuales, tributario de las costumbres europeas, incapaz de servir como factor de cohesión y de unificación en el nivel de las amplias masas populares.
Surgió entonces el nacionalismo populista-desarrollista, que para la época de Lázaro Cárdenas tenía dos décadas de maduración y una plataforma programática asentada en la constitución mexicana de 1917.
Las revueltas de los intelectuales contra los estados unidos, recurrió a la historia, al folklore y la música para despertar el sentimiento nacionalista, pero ignoraban el propósito de los grupos nativos.
En 1930 surge el nacionalismo popular, identificándose con las diferentes clases y proveía la única directiva aceptable para un desarrollo en el futuro y mantener la unión entre los grupos más diversos.
Las protestas surgen por el malestar de las clases medias, atacan al estado por su trasformación de clase y no por su poder fuerte y autoritario, aun y cuando se trato de recrear el distanciamiento entre estado y clases dominantes, dejando ver el contenido más real del movimiento del 68.
Estos ataques al régimen de Díaz Ordaz, se manifestó y se hicieron generales con los universitarios contra el ejercito los intereses extranjeros, la CIA, el sindicalismo gangsteril, el charrismo y sus líderes. Luchas por demás incoherentes.
Este régimen fue la expresión más declarada del estado burgues, su carácter reaccionario es irreversible y las contradicciones preparan para la lucha por el socialismo, y el movimiento estudiantil hace una alianza con la clase trabajadora.
Las motivaciones y malestares convergen en un mismo vértice: estado fuerte, diazordacismo, estado de clase, estado autoritario, otorgándole la coherencia a esta lucha social. En todos los casos el adversario era el mismo.
El movimiento estudiantil del 68 fue reformista y readecuo los aspectos de la organización social y política de México, que modernizo a la sociedad mexicana dentro de su continuidad sin llegar a revolucionarla.
Con las derrotas de ferrocarrileros 1959 y de los docentes de la sección 9 en 1960 el gobierno pasó a la ofensiva contra todos los sectores que pedían su independencia del gobierno y de su partido político PRI.
El encarcelamiento, la represión laboral, la negación de los derechos democráticos y hasta el asesinato político fueron utilizados sin miramientos por los regímenes de López Mateos y Díaz Ordaz, sembrando el terror entre los luchadores sociales.
Muchos movimientos en busca de mejores condiciones profesionales y económicas, fueron reprimidos por la fuerza pública, era notoria la intolerancia con la que el Estado resolvía los problemas sociales y políticos.
El uso de la violencia penetro hasta las entrañas del PRI, donde se disolvieron las diferencias con lujo de violencia, dejando decenas de muertos quedando impunes las acciones cometidas.
La anulación de los derechos democráticos e individuales consagrados en la constitución, acabaron por alcanzar a las universidades, donde algunas fueron ocupadas con lujo de violencia por el ejército mexicano, estrangulando los insipientes movimientos democráticos que se estaban llevando a cavo en estas instituciones.
La lucha por la reinstalación de los maestros cesados se convirtió en el eje político de la actividad sindical, entre los maestros de la sección 9 y los maestros del charrismo quien controlaba prácticamente todas las instancias de gobierno del SNTE, a quien el gobierno le brindaba todo su apoyo. Acabo por integrar a todas las fracciones a los órganos de gobierno sindical.
Nuevas tácticas dieron algunos frutos, pero no suficientes, derivando en la ruptura y formación de nuevas agrupaciones sindicales, convocando a un gran número de congresos, para solicitar mejoras económicas para todos los maestros, planteamientos que fueron rechazados de forma determinante.
Los maestros disidentes se organizaron para luchar por el pliego petitorio, coincidiendo con el estallido del movimiento estudiantil, y de nueva cuenta siendo reprimidas con lujo de violencia estas manifestaciones, por la política antidemocrática que impulsaba el Estado.
Ambas manifestaciones se reunieron en el zócalo capitalino, siendo agredidos por granaderos, la violencia se extendió por toda el centro de la ciudad, los alumnos fueron salvajemente golpeados, por las fuerzas represivas que irrumpieron el viejo barrio universitario.
Con esta irracional forma de actuar del gobierno se inicia el movimiento estudiantil de 1968, la inconformidad estudiantil, encontró eco en la reprimida insurgencia magisterial, quien decidió apoyarlos abiertamente. Apoyo que se fue manifestando con la integración de más escuelas y padres de familia.
Por las características del movimiento estudiantil los maestros de educación media y superior se constituyeron en coalición pro-libertades
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